Para cualquier mascota que tengamos en casa las plantas pueden llegar a resultar muy llamativas, especialmente si el animal que convive con nosotros es un gato. Aunque no todos tienen interés por ellas, algunos de estos felinos se enamorarán de su olor y querrán jugar con ellas todo el tiempo y mordisquearlas, por ello, es importante saber que no todas las plantas de interior son seguras.

La lista de plantas que pueden llegar a ser perjudiciales para los gatos es increíblemente extensa. El acebo, el lirio, la hortensia, el tulipán, el crisantemo, la hiedra, la flor de pascua y el muérdago, son las más fáciles de encontrar en nuestras casas y son bastante perjudiciales para nuestros gatos, ya que puede causarles trastornos digestivos, dermatitis alérgica, trastornos nerviosos o cardíacos e incluso provocarles fallo renal o problemas respiratorios.

También existe una larga lista de plantas que podemos tener en nuestros hogares y que, pueden proporcionarles beneficios.

Ejemplo de éstas son la gran mayoría de plantas aromáticas que se utilizan en la cocina, con alguna excepción como el laurel.

Existen algunos tipos que no solo son plantas no tóxicas para gatos sino que, se recomiendan especialmente por su olor atrayente o por sus propiedades medicinales. Las plantas pueden funcionar como estímulo, como un extra de nutrientes o incluso para gestionar emociones.

Aquellos gatos amantes de las plantas no solo se divertirán jugando con ellas, mordisqueándolas o restregándose contra sus hojas o flores, sino que también reducirán su estrés y disfrutarán de su aroma.

El catnip, conocida como menta gatuna o hierba para gatos, resulta atrayente y estimulante para algunos felinos y produce reacciones en ellos como restregarse, morderla o jugar más que de costumbre. Es común encontrarla en muchos de los juguetes y rascadores para gatos.

La hierba germinada se puede cultivar en casa y suelen utilizarse semillas de centeno, cebada, avena o trigo. Proporciona nutrientes, vitaminas, fibra y ácido fólico, además de favorecer la salud digestiva y el tránsito intestinal.

Otros ejemplos de plantas beneficiosas para los gatos son la valeriana, que tiene un potente efecto calmante que pueda ayudar en casos de estrés o ansiedad; la lavanda, también con propiedades relajantes, antivírica y antibacteriana; o la menta, beneficiosa para el aparato respiratorio y digestivo.

Perejil, romero, tomillo y albahaca también son beneficiosos para nuestros gatos, el primero es bueno para el sistema urinario, el segundo es antiséptico, diurético y funciona como relajante muscular; el tercero tiene propiedades relajantes y fortalece el sistema inmunitario y el cuarto se utiliza como analgésico.

Expertos explican que los gatos ingieren plantas porque consiguen nutrientes y vitaminas, mejoran sus digestiones y el tránsito intestinal, para producirse el vómito de forma voluntaria porque se sienten mal, para facilitar la expulsión de las bolas de pelo y para usarlas como tratamiento antiparasitario.