sábado 15 Nov 2025
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UN PREMIO INMERECIDO

14 octubre 2025 9:50 pm
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El premio Nóbel de la paz es un reconocimiento a una contribución excepcional de una persona u organización que haya trabajado mas o mejor en favor de la fraternidad de las naciones y por promover acuerdos de paz. Es otorgado por un comité de 5 personas nombradas por el parlamento noruego, que en la actualidad tiene mayoría conservadora.

Las decisiones de este comité no siempre han sido acertadas. Dejando grandes dudas, si en algunas ocasiones ha influido el lobby o la presión de gobiernos o instituciones de extrema derecha. No se justifica que se lo hayan otorgado al secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger, que incentivó la guerra y la invasión a Vietnam, con cientos de miles de muertos. Que intervino en golpes de Estado a Bolivia y Chile y Argentina para apoyar la instalación de regímenes dictatoriales con los sátrapas Banzer, Pinochet y Videla.

Tampoco se lo merecía Barack Obama presidente de Estados Unidos, que ordenó atacar e invadir a Siria, Afganistán, Yemen, Pakistán, Somalia, Irak y Libia, donde fue derrocado y asesinado el presidente Muamar al Gadafi. También, con cientos de miles de muertos y destrucción de los países.  

Y muchísimo menos la burguesa María Corina Machado que en vez de buscar la pacificación de Venezuela, participó en el golpe de Estado de 2002 al presidente Hugo Chávez. Apoya y financia las acciones violentas de las guarimbas que con barricadas callejeras y bloqueo de carreteras buscan desestabilizar el país. Además, como traidora vendepatria le pide ayuda al presidente de Estados Unidos que le imponga sanciones económicas para bloquearlo, le envíe una ofensiva militar frente a las costas venezolanas, que asesina a ocupantes desarmados de pequeñas lanchas. Y que insiste en que si es necesario invada y deponga al presidente Maduro, lo que provocará miles de muertos, heridos, desplazados y destrucción de su país.

El premio a quien se arrodilla ante el poder imperial y pretende ser títere de Estados Unidos, es un despropósito, un contrasentido, una incoherencia, una invitación para que invada a Venezuela, violando los principios suscritos en la ONU de respeto a la libre autodeterminación de los pueblos y la no injerencia en asuntos internos de las naciones.

En vez de dedicarle el inmerecido premio a su pueblo venezolano, se lo ofrece al agresor Donald Trump, que porque el sí lo merecía. No puede haber mayor demostración de abyección y falta de patriotismo. No se lo otorgaron al terrorista y genocida Trump -que apoya incondicionalmente el genocidio palestino- por su falta de tacto al exigirlo, con la amenaza que, si no se lo concedían, seria un insulto para su país.

El premio nóbel se ha politizado y desprestigiado, al concederlo a quien no tiene méritos, y en cambio, en su momento no se lo otorgaron al más grande pacifista, Mahatma Gandhi, adalid de la independencia de la India, a través de una resistencia pacífica y con huelgas de hambre.

En Colombia la extrema derecha esta de júbilo, en el paroxismo. Celebran este premio como si fuera personal, porque consideran a María Corina una heroína, una diosa, la mujer más grande de América. Pero en cambio rechazaron el premio al presidente Santos por el acuerdo de paz con las FARC, y dijeron que había sido comprado. Como siempre están dominados por la paranoia del comunismo y el socialismo, y el odio contra los dirigentes de izquierda Petro y Maduro; porque defienden la soberanía de las naciones y no se someten al dominio del imperio norteamericano.

Con hipocresía se proclaman defensores de la paz, la democracia y la seguridad ciudadana; cuando se opusieron y se oponen a los acuerdos de paz; porque siembran miedo y ofrecen más guerra como estrategia electoral. Apoyan a los terroristas y genocidas Trump y Netanyahu. A este último lo visitan el expresidente Duque y el magnate Gabriel Gillinsky, y afirman indignamente que es un honor darle la mano y apoyarlo.

Aquí tenemos especímenes de igual o peor catadura que la Machado, anhelan que el delincuente Trump-condenado por la justicia norteamericana, pero indultado por su elección-, ordene invadir a Colombia, Venezuela, Cuba y Nicaragua para derrocar a sus gobernantes, e imponer títeres que cumplan sus órdenes.

Se acabaron los valores. Solo existen intereses. El mundo esta dominado por los peores seres “humanos”, ineptos, arrogantes, ególatras, corruptos, asesinos y melómanos. El asesino y corrupto Netanyahu, propone al delincuente y terrorista Donal Trump para el premio nobel de la paz. Y este le devuelve al favor solicitando al presidente de Israel que indulte al investigado Netanyahu, al que considera el mejor líder en tiempos de guerra.   

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