martes 20 May 2025
Pico y placa: 7 - 8

Sombras que sanan: especies sintrópicas del café

29 abril 2025 10:53 pm
Compartir:

Avanzar hacia un modelo de desarrollo más justo y sostenible

Durante diciembre de 2024, enero y abril de 2025, el docente del programa de Biología de la Universidad del Quindío y estudiante del doctorado en Ciencias con énfasis en biología, Larri Álvarez Rodas, realizó su pasantía en la empresa amricana Green Coffee Company, la cual se ha posicionado como uno de los principales referentes en la producción de café de alta calidad en Colombia. Actualmente, esta compañía opera más de 50 fincas cafeteras en el suroeste antioqueño, una región de gran riqueza ecológica y sociocultural.

Procesos

La experiencia permitió documentar procesos agroindustriales que la empresa desarrolla desde una mirada integral de sostenibilidad, incluyendo prácticas agrícolas responsables, certificaciones internacionales (como Rainforest Alliance, Fair Trade y USDA Organic), así como innovaciones orientadas a la economía circular.

Dentro de esta formación se destacó el aprovechamiento de subproductos del café, como el mucílago y la cáscara, para la producción de alcoholes industriales y biochar. Este último, un carbón vegetal obtenido mediante pirólisis, que mejora las propiedades físicas y biológicas del suelo, favoreciendo así su fertilidad y la captura de carbono.

¿Qué es el biochar?

Es un carbón vegetal que se obtiene a partir de residuos orgánicos (biomasa), como restos de poda, cáscaras, madera o residuos agrícolas, como el mucílago o la cáscara del café, mediante un proceso llamado pirólisis.

Este proceso calienta la biomasa en ausencia o con muy poco oxígeno, lo que impide la combustión total y produce un material carbonoso muy estable. El resultado es un carbón poroso, rico en carbono, con propiedades especiales que lo hacen útil para mejorar el suelo.

Pasantía

Desde el enfoque biológico, la pasantía incluyó la realización de inventarios florísticos en remanentes de bosque y otras coberturas vegetales asociadas al cultivo, generando insumos clave para la gestión ecológica del paisaje. Este ejercicio se integró con un análisis territorial que permitió identificar la necesidad de mejorar las conexiones ecológicas entre fragmentos de vegetación nativa.

“Uno de los logros centrales de esta experiencia fue la formulación de un modelo de especies funcionales para el sombrío del café, basado en los atributos ecológicos del ecosistema. Como resultado, se propuso un grupo de 63 especies nativas y adaptadas denominadas “Especies Sintrópicas del Café”. Estas plantas no sólo proveen sombra, sino que también cumplen múltiples funciones ecosistémicas: protegen el suelo, atraen polinizadores, son buenas fijadoras de nitrógeno, regulan plagas, retienen humedad y aportan materia orgánica, generando un agroecosistema más resiliente, saludable y propicio de la agricultura regenerativa”, mencionó el docente Álvarez Rodas.

Red

La propuesta fue representada mediante una red de relaciones funcionales, donde cada especie se conecta con múltiples beneficios ecológicos y todos confluyen hacia un núcleo central: el cultivo de café. Esta representación no sólo evidencia la multifuncionalidad de las especies, sino también la necesidad de diseñar cultivos en red con enfoques de manejo integrado que piensen en las interdependencias entre suelo, flora, fauna y productividad.

Adicionalmente, explicó el doctorante uniquindiano, “estas especies sintrópicas cumplen un rol clave como corredores ecológicos, al interconectar fragmentos de bosque remanente y favorecer el desplazamiento de fauna silvestre. Su implementación estratégica permitiría restaurar la conectividad ecológica del paisaje cafetero, generando “puntos nodales” que potencien la biodiversidad y los servicios ecosistémicos”.

Desarrollo

Este tipo de intercambios entre la academia y la empresa privada son fundamentales para avanzar hacia un modelo de desarrollo más justo y sostenible. Además, la presencia del biólogo Gustavo Adolfo Gómez Zuluaga (egresado del programa de Biología de la Uniquindío) liderando la gerencia de sostenibilidad en la empresa es una muestra clara del papel transformador que puede asumir nuestra disciplina, integrando la investigación científica con los desafíos reales del territorio. La experiencia concluyó con la entrega de semillas para su propagación, conservadas previamente en el vivero de la Universidad del Quindío bajo el acompañamiento técnico del viverista y agrónomo Gerardo Ramos Valdés.

Finalmente, es indispensable resaltar el papel del Doctorado en Ciencias de la Universidad del Quindío y de la Facultad de Ciencias Básicas, que al promover este tipo de alianzas demuestra su compromiso con una formación crítica, aplicada y conectada con las necesidades sociales, ecológicas y productivas del país.

Te puede interesar

Lo más leído

El Quindiano le recomienda