LAS HISTORIAS DE LEHDER EN EL QUINDÍO/ Su padre alemán y sus primeros años en Armenia

31 marzo 2025 11:15 pm
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El regreso de Carlos Enrique Lehder Rivas a Colombia y el episodio que vivió durante el último fin de semana tras su retención el pasado viernes y su liberación ayer lunes, ha suscitado un vivo interés por este personaje nacido en Armenia, y que pagó 33 años de cárcel en Estado Unidos por el delito de narcotráfico.

En tal virtud, EL QUINDIANO contará en este espacio parte de su historia en el Quindío, gran parte de ella narrada por el propio protagonista en su libro “Vida y muerte del Cartel de Medellín”, publicado por Penguin Randon House Grupo Editorial. 2024

Hoy les revelamos lo que Lehder sostiene sobre su familia, que está contenido en el Prefacio. Dice Lehder: “Nací el 7 de septiembre de 1949. Días después en ceremonia que tuvo lugar en la catedral de Armenia, capital del departamento del Quindío (Colombia), me bautizaron con el nombre de Carlos Enrique Lehder Rivas”.

Más adelante detalla quiénes fueron sus padres: “Mi padre, Guillermo Lehder llegó a Colombia en 1927, proveniente de Alemania, su país natal. Era ingeniero de una compañía alemana que diseñaba y construía obras de infraestructura. Tuvo a su cargo la construcción de la vía férrea que comunicaba a Pereira y Manizales, así como la estación del tren de esta última ciudad, de la que era oriunda mi madre, Helena Rivas. Allí se conocieron, se enamoraron, se casaron por la iglesia católica y, tiempo después, nacimos cuatro hijos. Desde ese entonces mi padre residió en Colombia; solo volaba esporádicamente a Alemania, con el propósito de visitar a nuestros familiares”.

Carlos Enrique Lehder revela cómo, desde niño, en Armenia, fue considerado como la ‘oveja negra’ de la familia. “Desde muy pequeño me consideraron el hijo rebelde, la oveja negra de la familia. Tuve todas las oportunidades de estudiar y seguir el camino que mi familia, con amor y esfuerzo, había trazado para mí, el cual incluía obtener un título universitario, pero por esas cosas misteriosas de la vida, no fue así. “Muy joven me decidí por dejar a un lado el estudio, y curioso y ansioso, empezar a aventurar por fuera de Colombia, en el que para entonces veía como el país más importante y avanzado del mundo: los grandiosos Estados Unidos de América”.

Espere mañana la historia de Toribio, su amigo de infancia en Armenia.

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