Álvaro Hernando Camargo Bonilla.
El uso de las medidas ha estado presente desde el inicio del origen del género humano en sus relaciones sociales de producción. La medición y estándares de longitud, superficie y volumen se establecían para garantizar la equivalencia en las transacciones comerciales, las distancias y demás medidas.
Precedente al Sistema Métrico Decimal, las medidas se procedieron de las partes del cuerpo (pie, codo, braza, pulgada, cuarta, etc.) que permitieron calcular los volúmenes y medidas. Las fracciones antropométricas como el dedo, el pie (cuatro palmas), el paso (distancia entre dos apoyos del mismo pie al caminar), el codo (un pie y medio), la palma (tiene cuatro dedos), la brazada (los brazos en cruz con las puntas de los dedos estiradas), la vara (medida de codo a codo), puñado.
El Congreso constituyente de 1821, ordena, organiza y fija las reglas del régimen político de la recién creada República de Colombia. Ordenamiento necesario para evitar inconvenientes debidos al disímil uso de estas antes de la primera constitución de Colombia, en el año de1821.
El desigual uso e interpretación de las pesas y medidas concebía perjuicio en las operaciones comerciales de compra y venta y otras actividades del orden comercial. Para facilitar e impulsar y dinamizar la actividad comercial exterior, y en las provincias cabildos, cantones, y parroquias, fue necesario la estandarizaron de los patrones de pesas, medidas de diferentes órdenes: de áreas, alimentos, aceites, medicamentos, monedas, metales preciosos, y otros efectos comerciales.
Para garantizar el uso oficial y evitar su alteración y falsificación, los modelos oficiales se marcaban con sellos y grabados especiales. Las entidades político-administrativas de la época, aplicaban el cobro del impuesto relacionado, y vigilaban el cumplimiento del uso estas marcas que usaban los particulares.
ALGUNOS ESTÁNDARES RELACIONADOS.
La tonelada colombiana será de veinte quintales.
El cahíz: medida utilizada para los granos y frutos secos. Se dividía en doce fanegas, de cuarenta y cuatro mil y tres pulgadas cúbicas y cinco líneas cada una.
La fanega: se subdividía en dos medias fanegas; en doce almudes; en veinticuatro medios almudes; y en cuarenta y ocho cuartillos.
El moyo: medida utilizada para los líquidos; se dividía en diez y seis cántaros, de una arroba de peso cada una.
La libra: poseía un peso ordinario de diez y seis onzas. La onza se subdividía, como antes, en medias onzas; en cuatro cuartos; en ocho ochavas o dracmas; y en diez y seis adarmes; el adarme en tres tomines; y éste en doce granos.
El marco: con un peso de media libra; la arroba, de veinticinco libras; y el quintal, de cuatro arrobas.
El pie: con una longitud de doce pulgadas; y la pulgada la de doce líneas; la vara con una longitud de tres pies; se subdividía en cuatro cuartas; seis sesmas, y ocho ochavas, equivalentes a treinta y seis pulgadas.
MEDIDAS DE SUPERFICIE.
El estadal: se componía de cinco varas de largo.
La fanegada: lo conformaba un cuadro de veinte estadales o cien varas de largo, y tenía por consiguiente cuatrocientos estadales cuadrados de superficie. La fanegada se subdividirá en cuatro estancias; la estancia, en cuatro celemines; y el celemín, en cuatro cuartillos.
La legua colombiana: constaba de seis mil varas de largo; y se subdividirá en tres millas, de dos mil varas de largo cada una.
Los caminos públicos que se abrieron a partir de 1821, tenían un ancho veinticinco varas por lo menos, siempre que lo permitiera el terreno, y serán tan rectos como sea posible; y a los que ya existían se les dio el mismo ancho, siempre que no resulte un perjuicio notable a los propietarios. En la distancia de cada legua se colocaba una señal que indicaba la distancia de un lugar a otro. En el cruce de caminos se fijaba igualmente un letrero que informara a los transeúntes sus diferentes direcciones.
Fuentes:
Congreso constituyente de 1821. Ley del 12 de octubre de 18