Cerca de 230 pacientes que están internos en la clínica de la Sagrada Familia de Armenia tendrán que abandonar sus camas en las próximas horas, frente a la determinación de la clínica de no prestarles más servicios.
La decisión se tomó por el incumplimiento de Nueva EPS con la clínica en los compromisos de pago pactados hace varios meses. Para estos 230 pacientes, las directivas de la Sagrada Familia están buscando los traslados respectivos.
A partir de hoy no se atenderá ningún servicio requerido por los pacientes de Nueva EPS, excepto las urgencias más graves. La EPS no ha hecho ningún pronunciamiento, a pesar de que ya fue notificada de la decisión.
La mayoría de los afiliados al sistema de salud en el Quindío pertenecen a La Nueva EPS.