La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) rechazan los actos de odio contra las expresiones simbólicas y artísticas de las Madres de Soacha, como las realizadas por el representante Miguel Polo Polo que tiró a la basura las botas que las Madres de Soacha habían puesto en la plaza Núñez como recuerdo de los falsos positivos el pasado 6 de noviembre de 2024.
El político Polo Polo echó las botas a la basura mientras decia “¿Quién le habrá pagado a esos 300 campesinos que vinieron aquí al Congreso a ensuciar la plaza Rafael Núñez para poner estas botas?”
La JEP y el CNMH resaltan el respeto que debe existir por la dignidad de estas madres y de todas las víctimas del conflicto armado en Colombia, quienes han luchado por el esclarecimiento de la verdad y la justicia por sus hijos desaparecidos, asesinados y presentados falsamente como bajas en combate.
La JEP ha probado, mediante diversas imputaciones, y así lo han reconocido 104 máximos responsables, entre ellos, dos generales, que en distintas unidades del Ejército existió una política de conteo de cuerpos que llevó a que, entre 2002 y 2008, se presentaran 6.402 asesinatos y desapariciones forzadas, en el crimen conocido como ‘falsos positivos’, sin perjuicio de la información que sobre el particular puedan tener instituciones como el CNMH en periodos distintos al señalado.
El CNMH en su deber de promover la búsqueda de la verdad y la construcción de la memoria sobre el conflicto armado interno y la JEP, como un tribunal que ha esclarecido a través de sus decisiones judiciales los ‘falsos positivos’, hacen un llamado a la sociedad por la tolerancia, el respeto de las víctimas y la salvaguarda de todas las expresiones de memoria que sobre el conflicto armado se presenten en el territorio nacional.