FLOR MULTICOLOR (II)

16 noviembre 2024 10:00 pm

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Guillermo Salazar Jiménez

La música del Pacífico invitó a bailar sobre la calle en el bulevar del río, Zona Verde de la COP16, dijo Rusbel Caminante, antes de la Plaza de Cayzedo –escrito así sobre la pared – apreció el edificio Jorge Garcés, construido en 1544, su color blanco y rosado recordaron los pétalos de la flor multicolor Inírida, símbolo de tal evento mundial. Otros, como los edificios de la DIAN y Colpatria, copiaron este símbolopara ampliar el colorido de los distintos proyectos ambientales que mostró Cali.

Los acuerdos políticos y las decisiones financieras para preservar el futuro ambiental del mundo contrastaron con las reflexiones y propuestas de gente comprometida con tutelar el cambio climático y la destrucción del planeta tierra, comentó Juanita Lectora, hombres y mujeres campesinas, indígenas, afros, impulsoras de proyectos, líderes ambientalistas y académicas, se juntaron para demostrar lo importante que resulta la sociedad comprometida. Porque la defensa del planeta va más allá de los aportes económicos, agregó Rusbel, los participantes del común en la Zona Verde entendieron que su ejemplo era un compromiso con el futuro de las generaciones venideras; sus hijos y nietos no podían morir de hambre o asfixiados. 

Rusbel afirmó que el compromiso social se concretó de forma patética, pero a la vez con amor y lealtad con la naturaleza, a través del llamado Jardín de las segundas oportunidades. En un arco florecido aparecían 48 fotos enmarcadas con plantas y animales extintos, titulado “Cementerio de fauna y flora.” En otro, adicionó Juanita, 24 fotos invitaban a los presentes a reverenciar los esfuerzos por preservarlos con el rótulo “En estado de conservación.” Un jardín que dolió y alegró, que denunció e invitó, Juanita recordó la sentenciaaterradora de los científicos, “Cada vez que perdemos una especie rompemos una cadena de la vida que ha evolucionado durante 3.500 millones de años”.

Vi y sentí una comunidad organizada y comprometida con el eslogan de “Cali, la ciudad donde debes estar”, expresó Juanita, ojalá las transformaciones urbanas de otras ciudades colombianas se diesen en torno de un evento cultural mundial. Punto de partida para promover el cambio en la forma de pensar y actuar, adicionó Juanita, pretexto para impactar la conciencia social a favor de la paz entre nosotros y con la naturaleza. Las comunidades negadas alzaron su voz en la Zona Verde para mostrar su diversidad con Eduardo Galeano porque “Lo mejor que el mundo tiene está en los muchos mundos que el mundo contiene”.

A las 2:15 PM las nubes protegían del sol a los caminantes. De regreso Rusbel y Juanita añoraron los eventos culturales vistos en el Teatro Jorge Isaac y cruzaron por el Puente Ortíz, construido por el ingeniero Fray José Ignacio Ortíz entre 1835 y 1845, para llegar a la Plaza Educación y Participación. La música chocoana despidió el paseo por el bulevar del río; de nuevo, frente a la flor multicolor, Rusbelconvencido del futuro protagónico de las comunidades antes olvidadas, expresó con Paulo Freire, “No hay denuncia verdadera sin compromiso de transformación, ni compromiso sin acción”.

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