La Policía del Quindío, en compañía del Ejército en la región y la Secretaría de Gobierno de Armenia establecieron un seguimiento continuo a las actividades que se cumplen en el parque y sector llamado Laureles, en el norte de Armenia, tras las permanentes quejas de los vecinos.
Una de las quejas más frecuentes señala que la institución Cruz Roja Colombiana arrendó una parte de sus locales de las edificaciones que tienen en esa zona, para actividades de bares y cafés, donde se venden bebidas no solo dentro de las instalaciones, sino a las afueras, generando un problema de ruidos y escándalos.
También, sobre la carrera 15, frente al propio parque, se arrendaron locales para la venta de licores, en muchos casos con licencias para una actividad diferente. Estos establecimientos venden licores y diferentes cocteles, que la mayoría de la gente lleva al parque, a consumir a cielo abierto, lo que está prohibido por el Código de Policía y Convivencia Ciudadana.
Y el peor problema denunciado por los residentes de la zona es el consumo de alucinógenos, especialmente dentro del parque. Hay otros fenómenos que afectan la tranquilidad de este sector, como el parqueo de motos y carros que limitan la movilidad y las constantes riñas entre los consumidores de drogas y licores.
La Policía, el Ejército y la Secretaría de Gobierno realizan labores de control, de acuerdo con el siguiente informe de la propia Policía. Ver el vídeo: