ACERTADO…LAS ESTRELLAS SON NEGRAS

28 octubre 2024 10:20 pm

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Nelson Guzmán Baena*

En un breve recorrido por el departamento del Choco en el año de 2010 en apoyo a la candidatura a la asamblea departamental  de Noé Mena  fallecido recientemente y proporcionándonos variadas atenciones, por allí mismo andaba Carlos Gaviria Díaz candidato al Senado que salió por primera vez; invitación que me formulo el químico farmaceuta de la Universidad de Antioquia José  Isaac Mosquera Palacio abarcando un encuentro en la Cooperativa de educadores del Chocó con licor, sancocho de media noche como novedoso con queso dentro del mismo y coincidiendo en una parte de la fiesta de San Pacho “San Francisco de Asís” (3 septiembre -octubre 5) tratando además a la familia Mosquera Palacio donde pernotamos  y  desde  pleno centro de la ciudad se nota alegre algarabía por sus celebraciones, colorido, humildad y en diálogos con mis colegas docentes, hermosas mujeres y llegando hasta el colegio Ricardo Carrasquilla en honor a este escritor y educador. José I. aparece como integrante de la primera promoción de bachilleres en el  año de 1948 y cuando uno conversa con este plantea que fue por rebeldía solo confundido con ideas que se resistieron a no irse a otros territorios dándosele continuidad a sus estudios secundarios hasta cubrir el sexto y optar su título de bachiller y quedándose allí todos los futuros egresados: ¿porque tenían que abandonar su capital si esto les pertenecía o era otra modalidad de desplazamiento forzado y nunca de gusto para los jóvenes? Toda una atención afable de la población y de admiración el cantar del rio Atrato que no se olvida y siempre recuerdo todo lo que disfrute.

De regreso al Quindío ingresamos a Certeguí municipio de Chocó con unos 5635 habitantes según DANE 2018 fundado un 16 de octubre de 1775. donde nació el compañero Mosquera hace 97 años y firme como un roble con tremenda admiración allí mismo ocurrió el nacimiento del creador de la literatura afro colombiana Arnoldo Palacios en el año de 1924 y fallece en Bogotá el 12 de noviembre de 2015 y mayor asombro primo de mi compañero de viaje José Isaac Mosquera Palacio.

Me ubicaré en el libro “Las estrellas son negras” de Arnoldo Palacios publicado en el año de 1949 básicamente en lo social lo literario su forma y estilo se los dejo a los tratadistas de la literatura. Esta novela indudablemente tiene que ver con la tragedia poco superable del 9 de abril de 1948 y la sufrida históricamente por los negros traídos del África ya que la constante ha sido el tedioso sentido de la migración forzada con el objetivo de explotar los recursos naturales y someter a la población excluida de medios de producción para obtener grandes riquezas que ojala se discutan con holgura e identidad de clase en este COP16 que se festeja en Cali (Valle del Cauca) aún no se ha perdido la raíz del pésimo comportamiento de estas indignas empresas, transnacionales o privadas de gran capital que solo persiguen el lucro cesante y la humillación de los seres racionales ahogándolos en la sumisión, el abandono y el hambre lo que se  personifica en Irra .Como nos lo plantea su LIBRO CUARTO Entonces Irra sintió el aullido del hambre. El hambre aulló en todos los agujeros de la casa y en el polvo de las calles. ¡Hambre! Pág. 144. Y como aun no la queremos entender que hay un camino a seguir para abolir del planeta esta horripilante acción de maldad humana. Alejada de los credos.

A pesar de estas angustias existenciales hay algo en particular en los humanos y que va con ella es la alegría que artificialmente se respira lo cual nos caracteriza como una población altamente resistente o conformista y no podemos negarlo que la alegría como nos lo orienta este periodista y escritor Arnoldo quizá perturba por las puertas, ventanas y rendijas de otros hogares…pero a la casa de Irra nunca jamás. pág. 137 LIBRO TERCERO Nive.

Quien no sueña en Colombia y en cualquier parte del mundo ser una persona útil a la sociedad todos desde niños se nos inculca esos valores de ser alguien productivo, intelectual y estar al servicio de la sociedad. El sueño de Irra también era poder tener una carrera, médico o ingeniero, proporcionarles buena vida a su mama y a sus hermanas. pág. 141 Y la mía, señor es una estrella negra… ¡Negra como mi cara, señor!pág. 91. LIBRO SEGUNDO Irra.

Considero que si hay alternativas y una es no creer tanto en lo que nos dicen los medios de comunicación mancillados, su papel es definido y en identidad de clase con los dueños del capital que no piensa nada en lo humano solo en abrazar dinero para sus intereses estomacales y para guardarlos en los paraísos fiscales.  Irra nos muestra un ejemplo de ello cuando implora ante la vida que se le provea de lo vital para subsistir y esa queja nunca se escucha, ni se ha escuchado ni se escuchara al no ser que lo definamos por la lucha y conciencia de clase.

Irra, cruzo los brazos y balbuceo una oración: “Dadnos señor, algo que comer esta tarde. No hemos comido desde ayer. Ayer almorzamos cada uno con medio platino cocido no más. LIBRO PRIMERO Hambre. pág. 41. Esto me trae recuerdo de hace medio siglo atrás cuando docentes no alcanzaban a satisfacer los gustos de sus hijos con los bajos salarios que devengaban y le decían a sus menores vamos al restaurante y fuera de allí disfrutaremos del olor a pollo u otros acontecimientos que denominaban alimentarse psicológicamente. Sin embargo, había noticias que publicaba El diario Tiempo… que daban a conocer el proceder que se adquiere por algunos cuantos que entendían que era luchando como se trasforma la realidad histórica y más la de aguante. -¡El Tiempo!…¡El Tiempo! Graves desórdenes en Barranquilla… El pueblo se apodera de los almacenes y los saquea… ¡Se temen repercusiones en Bogotá!… ¡Cali! ¡Medellín!… Expectativa por la manifestación obrera el Primero de Mayo. Pág. 50. Nosotros no luchamos por las cosas pequeñas, sino por la cosa grande: justicia económica para los oprimidos. pág. 71-72

Y discursos, más… sin llegar como a un objetivo preciso y el tiempo se nos va como se nos va la vida sin pensarlo y así llegamos a los fines de la existencia todavía pensando que hacer. Como constante palabrería ¿Por qué no empleaban en algo su tiempo ese mugroso, perezoso? (Pág. 79-80) repitiéndose la misma palabrería insulsa y vaga de los que durante más de 200 años nos han estropeado nuestros derechos los gobernantes de la burguesía criolla. ¿Acaso todo el mundo no tenía metido en la cabeza que el Choco padecía una miseria terrible y que no circulaba dinero? pág. 83. Y se acumulaban muchos hechos indignos como el saber que las becas eran solo para los blancos y muy escasas. Me revivió épocas de sitios geográficos de mi ciudad Calarcá como Bataclan pág. 56 donde se presentaba la quebrada para ir a baño y otros sus primeras relaciones de pareja y como nos lo indica frase que se empleaban en la escuela-la tuya rabo e cabuya, quén er injierno tá haciendo bulla. Pag 61

Mi texto guía para esta somera reflexión es publicado por la universidad de los ANDES, su autor Arnoldo Palacios en sus 164 páginas destaca inteligencia y resiliencia ante su precaria situación física y económica igual su familia  proyectarlo,  demostrar de que estaba hecho y salir avante en su desarrollo intelectual tanto que las estrellas negras no aparecen en su propio contenido a excepción de estas otras: La noche son estrellas…y como la estrella del boga apartan las nubes pardas en la noche…pág. 161. La interiorización de la lectura si tiene puesto los ojos sobre la población elegante y productiva del Choco, además hacen parte de la contribución a la Biblioteca de literatura afrocolombiana y de la Biblioteca de Cultura de Colombia. 2010. Con prólogo del eminente escritor y periodista colombiano y del Choco Oscar Collazos (29 de agosto 1942 Bahía Solano- 17 de mayo 2015 Bogotá). Uniéndome al año del centenario de nacimiento de Arnoldo Palacios por su capacidad creativa en defensa de la soberanía y la paz con justicia social. 

*Presidente Comisión de estudios e Investigación de la U.I.S. (Unión Internacional de Sindicatos) de P y J (Pensionistas y Jubilados) de la F.S.M. (Federación Sindical Mundial).  Calarcá, octubre 27 de 2024

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