Nelson Guzmán Baena*
Existen instituciones que por su nombre nos traen recuerdos así sea remotos e ignorados y creo el papel de estas debería estar centrado en fomentar los conocimientos sobre el acontecer real más si es de personajes notables que legaron enseñanzas de la relación sociedad naturaleza y con carácter pedagógico.
Cómo recuerdo encontrarme en Rivera (Huila) hace doce años acompañando eventos familiares llamados encuentros y que ricura conjugar dos hechos vitales: el primero reconocer que el nombre de este municipio opita se debe a un hombre estudioso egresado de la Universidad Nacional de Bogotá en derecho y conocedor de la frontera amazónica con Colombia en particular la de Venezuela, Ecuador, Perú, Brasil y como sensibiliza los sucesos nunca agradables que se producían en esta región selvática en cuanto al usufruto humano entre ellos indígenas y negros en la obtención de la goma:“…¿Cómo pensar que nos apalearan, nos persiguieran, nos mutilaran aquellos señores de servil ceño y melosa charla que salieron a recibirlo en la Chorrera y en el Encanto? Pág. 201-202… Letras latinoamericanas. José Eustasio Rivera. La vorágine. Panamericana Editorial. Octava reimpresión. Agosto de 2014. Prologo Germán Espinosa. Bogotá. D.C. 328 Páginas.)…”. José Eustasio quien dio origen a comienzos del siglo veinte (1924) a su gran obra maestra de literatura La vorágine que profetizará más honrosa por el lado de la novela como obra narrativa literaria: “… Cuente usted con que la novela tendrá más éxito que la historia… (Ib. Pag 187)…”. Y lo segundo el ambiente familiar que se respiraba en sus fuentes termales. Y nunca de vida el que después de 100 años se siga cometiendo similares arbitrariedades a los desamparados de recursos: “… El sabio seguía impertérrito, fotografiando mutilaciones y cicatrices. “Estos crímenes, que avergüenzan a la especie humana-solía decirme- deben ser conocidos en todo el mundo para que los gobiernos se apresuren a remediar” envió notas a Londres, París y Lima… (Ib, Pag 202)…”.
El nombre del municipio Rivera se dio con la ordenanza No. 4 de 1943 en memoria perenne de su escritor José Eustasio Rivera (19 feb de 1888-1 dic 1928). Conocido como el municipio verde de Colombia, Su población atenta, paisaje exuberante y gastronomía exquisita. Seguro que Caso similar en mi pueblo Calarcá preguntar por Luis Vidales Jaramillo 1904-1990). Fue fundada en 1888 en el sector “aguas calientes” con el nombre de San Mateo y renombrado “Rivera”.
Ahora aún más he deseado aproximarme a ese gran ilustre y aquí sí que cabe ese dicho que quien no conoce la historia está obligada a repetir los acontecimientos que oscurecen nuestra vida nacional. Donde por no conocerla estamos sufriendo casi las mismas temeridades que nos refiriera Rivera en este libro y a favor de sectores excluidos como los indígenas, los negros, los corteros de caña, los esclavos y los campesinos quienes siempre sueñan en trabajar para acumular dinero y luego disfrutar: “… El peón sufre y trabaja con deseo de ser empresario que pueda salir un día a las capitales a derrochar la goma que lleva. (Ib, Pag 183)…” y los magnates tiene su norte identificados en sus intereses: “…-¿Qué proyectos ocultan ustedes, que me preguntan por los caucheros? El tal Barrera se robó esa gente y se la lleva para el Brasil, a venderla en el Guainía. (Ib, Pag 159)…”
Viva novela por sus descripciones macabras en ciertas páginas más gratas en otras, pero con un sabor como debieran escribir los “prominentes” de la postmodernidad; sin temor a dudas y sin esconder los sufrimientos que padecen ciertos humanos producto de la expoliación y carencia de educación. Leámoslo: “… Y, muy campante, seguirá atrincherado en su estupidez, porque a esta pobre patria no la conocen sus propios hijos, ni siquiera sus geógrafos. (Ib. Pag 295) …”
Es más uno se atrevería a pensar que a los educandos se les debiera orientar metodológicamente para su enfrentamiento en la lectura y que conozcan cual ha sido el desenvolvimiento de nuestra sociedad. En dialogo con José Edison y sus 81 años de existencia, hermano lingüista; me hace ver como esta novela es una de las grandes obras literarias que se hayan producido en el Siglo XX al lado de otros como Gabriel García Márquez (colombiano 1927-2014), Rubén Darío García Sarmiento o Rubén Darío (nicaragüense 1867-1916)
José Eustasio buscador de otra tierra prometida, muere en Nueva York e igualmente dejándonos unos sonetos maravillosos en su poemario tierra de promisión (1921).
También repaso que hace 46 años en el barrio la Isabela de la capital quindiana (Armenia) había una escuela llamada José Eustasio Rivera donde solo se pensaba en hacer próspera nuestra ciudad y niños educados para la sociedad, sumando, restando, multiplicando, dividendo y con lectura limpia y diáfana como el cristal del agua para adelantar con ganas sus estudios y transformar su entorno; esto no restaba que docentes no tuvieran su momento de risas y era la valiosa oportunidad para que maestro que llegara primíparo a sus funciones lo recibían y orientaban a que subiera al segundo piso donde la directora lo estaba esperando para recibir su nombramiento y tomarle las medidas del delantal que usaría en las aulas de clase porque este mensaje se desprendía de colegas como Rubinel Agudelo C. (Periodista), Jairo Giraldo Zapata (quien muere el 13 de septiembre del 2023 ingenioso y de conocimientos sociales en particular lo sindical y prestacional), Wilmer (picaresco), Luis (“Serio”), Gema (Jocosa), Luis Antonio Covaleda Garay actual rector de la Escuela Normal Superior del Quindío y como se gozaban al colega cuando salía del despacho de la “terrorífica” directora con cara roja y deprimido al no lograr la dotación. Reconocido el nombre de esta institución y existía conocimiento de causa del insigne personaje huilense JoseEustasio. Quien nos orientaba y lo aceptábamos; “… Amaba de la vida cuanto era noble: el hogar, la patria, la fe, el trabajo, todo lo digno y laudable. (Ib, Pag 268) …”
Jugosa novela social “…Antenoche entre la miseria, la oscuridad y el desamparo, nació el pequeñuelo sietemesino. Su primera queja, su primer grito, su primer llanto fueron para las selvas inhumanas. ¡Vivirá! ¡Me lo llevare en una canoa por estos ríos, en pos de mi tierra, lejos del dolor y la esclavitud, como el cauchero del putumayo, como Julio Sánchez! (Ib, Pag 316) …”
Recordando en este episodio a los simpáticos trillizos: Jorge, Jeremía y Jacobo cuidado por dos abuelas mientras sus padres laboran y que este 29 de agosto celebraron su primer cumpleaños así hayan nacido en solo 7 meses y su Padre Jorge Omar Rincón quien también los celebra en este mismo día.
Nos orientaba José Eustasio a velar los documentos que le sirvan de futuro a nuestra sociedad: “… Cuide mucho estos manuscritos y póngalos en manos del Cónsul. Son la historia nuestra, la desolada historia de los caucheros. ¡Cuánta página blanca, cuanta cosa que no se dijo! (Ib, Pag 317)…”
Se dan “selvas” en las ciudades como las que vivieron los de la región amazónica: “…Arturo Cova y sus compañeros fueron devorados por la selva. Así, lo hace saber el ultimo cable de nuestro Cónsul. (Ib, Pag 319)…”
E invaluable la visión que Rivera posee sobre la corrupción Estatal y que aun no la queremos comprender, entender o rechazar: “… Recordóme el ejemplo de tanto pisco que saquea con impunidad habilitaciones, bancos, pagadurías, sin menoscabar su buena reputación. Fulano de tal falsifico cheques, zutano adultero cuentas y depósitos, perencejo se puso por la derecha un sueldo adecuado a su categoría de novio elegante. (Ib, Pag 273)…”
Y finalmente me trae otros recuerdos como la colonización antioqueña con el escritor Benjamín Baena Hoyos Pereirano y abogado Unicauca (1907-1987) con su novela “El rio corre hacia atrás” editada en 1980; pues para Rivera como sería la tragedia experimentada que: “… las aguas corrían al revés (Ib, Pág. 118)…”. Se nota aguda situación humana que se vive en esta región geográfica de la selva que trastoca sus funciones hasta lo mental y lo podemos apreciar en: “ …Los sentidos humanos equivocan sus facultades: el ojo siente, la espalda ve, la nariz explora, las piernas calculan y la sangre clama: “¡Huyamos, huyamos!” (Ib, Pag 232)…”
*Presidente Comisión de estudios e Investigación de la U.I.S. (Unión Internacional de Sindicatos) de P y J (Pensionistas y Jubilados) de la F.S.M. (Federación Sindical Mundial). Calarcá, septiembre 13 de 2024