La Fiscalía 18 Seccional del Quindío no solicitó medida de aseguramiento a Ana María Arcila Escobar imputada por el homicidio de su compañero sentimental, Manuel Eduardo Dussán Giraldo, de 33 años de edad.
El ente investigador penal partió de la base de que esta mujer no tenía señalamientos en el Sistema Penal Oral Acusatorio –Spoa, y que, al parecer, sufría de maltrato intrafamiliar. Para la Fiscalía General de la Nación no fue contundente el hecho de que esta mujer hubiera solicitado a la Policía Nacional para reportar el suicidio de su compañero sentimental tratando, al parecer, de encubrir los verdaderos hechos, un homicidio.
Y es que la puñalada que sufrió Dussán Giraldo en su costado izquierdo fue mortal, tanto es así que a pesar de la atención de las autoridades, este hombre ya había perdido la vida.
Arcila Escobar, según las autoridades, indicó que su esposo que había quitado la vida, pero en la escena del crimen no se encontró el cuchillo, argumento más fuerte para descartar un suicidio. Pero, para la ciudadanía, llama la atención que el arma homicida fue encontrada en la pañalera de la hija de Arcila Escobar, un bebé de tan solo 11 meses de nacido.
El Juzgado Sexto Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Armenia legalizó la captura hecha por la Policía y la formulación de imputación por homicidio, pero al ver que la Fiscalía no solicitó cárcel (única autoridad en hacerlo) tuvo que dejar en libertad a la mujer que seguirá siendo procesada penalmente por este caso pero bajo libertad.
Los hechos
En el conjunto residencial Hacienda El Cortijo de Armenia, Manuel Eduardo Dussán Giraldo, de 33 años de edad, murió por heridas de arma blanca y su esposa fue capturada. Los hechos ocurrieron la mañana del pasado miércoles cuando la misma dama solicitó la patrulla policial del cuadrante de la zona para que llegaran al lugar de los acontecimientos por el supuesto suicidio de su pareja.
La Policía Quindío llegó al lugar de los acontecimientos y después de la inspección técnica al cadáver encontró que tenía varias heridas de puñaladas en su costado izquierdo, lo que indicaba, al parecer, no ser un suicidio.
Las autoridades consultaron a la ciudadana sobre la existencia del cuchillo a lo que ella respondió que no sabía. La Policía Nacional al ver que había un menor de edad solicitó la presencia de la Policía de Infancia y Adolescencia y esta autoridad buscó hasta en la pañalera del bebé y allí encontró el arma blanca.
La mujer fue capturada y el bebé fue trasladado hasta las instalaciones del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar -ICBF, para la restitución de derechos.