Madre encuentra el cuerpo de su hija después de 2 décadas de haber sido reclutada por las Farc

La JEP le contó a la madre lo qué pasó después de su reclutamiento: la niña murió en medio de un enfrentamiento con la fuerza pública.
27 agosto 2024 10:43 pm

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Una familia que llevaba más de dos décadas buscando a su hija, reclutada por las Farc-EP y desaparecida cuando recién cumplió sus 15 años, escuchó en una emisora de Caquetá una noticia que llamó su atención y le devolvió la esperanza.

La JEP y la UBPD estaban interviniendo el cementerio del corregimiento de La Unión Peneya, en el municipio de La Montañita, en busca de cuerpos de personas desaparecidas.

Desde hace 22 años, la madre sospechaba que su hija estaba ahí. Ese presentimiento lo confirmó el pasado 19 de agosto, el mismo día que la víctima cumpliría años, cuando por fin pudo despedirla y darle digna sepultura. 

“A mí me dio temor por la zona en la que vivimos, pero el propósito es superior al miedo», contó la mamá de la víctima durante la entrega digna.

“A mí sí me habían dicho que ella de pronto estaba en las fosas de la Unión Peneya. Eso para mí fue muy duro porque uno se confunde, no sabe qué creer. Yo decía que, si ella estaba ahí, ojalá que no quedara ahí. Que no quedara en ese lugar, yo quería rescatarla de allá», agregó entre lágrimas recordando los años de incertidumbre y el día que se llenó de valor para exponer su caso ante el Sistema Integral para la Paz.

Más de dos décadas después, la JEP le contó a su familia qué pasó después de su reclutamiento: la niña murió en medio de un enfrentamiento con la fuerza pública, ocurrido menos de un mes después de haber cumplido sus 15 años y de haber sido reclutada.

“Yo nunca me esperé que pudieran recuperar el cuerpito de ella, más hoy, que está cumpliendo años», dijo la madre de la víctima, mientras el forense de Medicina Legal entregaba detalles de la información que fue recolectada en los exámenes forenses realizados al cuerpo.

Era un día especial, no solo porque finalmente ahora su familia tiene certeza sobre el lugar donde reposa su cuerpo, sino también porque aprovecharon para cumplir una promesa que le habían hecho en vida: celebrarle sus 15 años. Así, la fecha del 19 de agosto adquirió un nuevo significado para esta familia de Caquetá.

El homenaje no terminó ahí. Teniendo en cuenta que todo rastro fotográfico con el que pudieran recordarla se perdió en el tiempo, como parte del proceso restaurativo, un experto en arte forense se sentó junto a ellos, los escuchó y les entregó un retrato hablado con el que hoy pueden recordarla en familia. Esta labor fue realizada con el apoyo de la DIJIN de la Policía Nacional.

Sus familiares se despidieron recordándola como una niña cariñosa, juiciosa, muy hogareña, que protegió a sus hermanos. “Ella tenía un lorito y le gustaban mucho los animales, para nosotros los menores fue nuestra segunda mamá», dijo su hermana menor.

También evocaron su alegría y pasión por la música. “A ella le gustaba mucho el vallenato, se peleaban el radio con mi mamá porque ella se gastaba las pilas», recordó otra de sus hermanas.

Esta familia cuenta con otra hija que también fue reclutada siendo niña y que se encuentra dada por desaparecida. Sus seres queridos continúan con su búsqueda y han renovado su fe y esperanza con la entrega digna de su hermana.

La JEP y la UBPD seguirán trabajando para lograr llevar la tranquilidad a este núcleo familiar con la identificación y entrega digna de la hija y hermana que aún falta por volver a su hogar.

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