Diego Arango Mora es, sin duda, el ‘Padre del Parque del Café’ y, por efecto directo, el promotor del Turismo Rural del Quindío. Su lucha empezó en los primeros años de la década del ochenta, cuando llegó a ser miembro del Comité Departamental de Cafeteros del Quindío. Arango se dio cuenta que la agroindustria más grande del país, la cafetera, no tenía un museo que contara su historia, teniendo en cuenta que de esta actividad agrícola colombiana el país proveía las divisas para su subsistencia.
Conoció el Museo de la Caña en el Valle del Cauca y se dijo: “Es necesario crear un Museo del Café, donde se valore la historia del más importante producto de exportación colombiano”. Y empezó su lucha. Incluso, muchos lo llamaron “El loquito del Museo del Café”. Hoy, casi 30 años después de inaugurado el portentoso Parque del Café, Diego Arango recuerda las peripecias de su creación, los esfuerzos, las reticencias y lo que representó este ícono en la creación de los parques temáticos del Quindío y de Colombia, como el impulso para el turismo rural en esta zona de los Andes de Quindío.
Diego Arango Mora es el invitado de EL QUINDIANO en VIVIR PARA CONTARLO. Entrevista completa en el siguiente vídeo: