EMOCIÓN Y CONSCIENCIA: QUINTO PRINCIPIO EN FELICIDAD LABORAL

9 noviembre 2021 10:22 pm

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Por: Juan Carlos Collazos Fajardo

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En el marco de la “Teoría de la Felicidad Laboral Superior” propuesta por (Blandón, GN & Collazos, JC 2018) surge el quinto principio para crear ambientes laborales felices, se trata de: la Emoción y la Conciencia. Seguramente se preguntarán los amables lectores la razón por la cual se expresa: “el” y no “los”, esto obedece simplemente a que los dos elementos están ligados para que el Mentor, Talento o CEO, puedan construir espacios laborales felices.

Mencionado lo anterior, es pertinente manifestar que a partir de esta columna se dejara de expresar estas humildes ideas en tercera persona y empezaremos a escribir con mayor cercanía, para la lectura en modo empresarial.

En este sentido, para iniciar el tema: la emoción se puede explicar cómo una reacción del Talento frente a un estímulo o situación en el trabajo; es su forma psíquica y fisiológica de reaccionar frente a lo que se presenta en el ecosistema laboral; mientras que la consciencia, es la capacidad para aprender a reconocer cada una de las emociones que proyectamos como seres humanos y preguntarnos sobre: “cuál es nuestra emoción frente a cada estímulo”, por ejemplo, frente al miedo, la tristeza, la alegría, etc.

Es pertinente aclarar que no es lo mismo consciencia que conciencia, según el diccionario de Dudas Lingüísticas. “La consciencia es la capacidad del ser humano para percibir la realidad y reconocerse en ella, mientras que la conciencia es el conocimiento moral de lo que está bien y lo que está mal” (2020). Con base en esta definición, nuestro interés no se trata de juzgar sino de aprender a estar despiertos y alertas frente a las situaciones laborales para tratar de resolverla con un verdadero control de las emociones y con asertividad los conflictos de la vida laboral, a través de la aplicación de los principios propuestos por la inteligencia emocional.

Cuando somos conscientes por ejemplo de la carga laboral que tenemos y las responsabilidades adquiridas, estaremos dispuestos a decir “NO” cuando un compañero se acostumbra a delegarnos el trabajo que él debe realizar. Empero, deberíamos expresarle esa respuesta de manera asertiva, es decir, explicando con los mejores términos que tenemos suficiente trabajo por realizar y no podemos comprometer el tiempo libre que pertenece a la familia para realizar un trabajo adicional.

Cuando somos conscientes y sopesamos la decisión de servir al otro de manera negativa o afirmativa, es porque hemos desarrollado la capacidad de consciencia para evaluar las implicaciones de alterar nuestro tiempo de descanso y de esta manera podremos tener un ambiente laboral y familiar feliz.

En el mundo laboral, las emociones son determinantes para establecer los niveles de productividad. El ser humano funciona en el campo de las emociones laborales como un Péndulo de la Emoción, el cual oscila entre el pasado, presente y futuro; cuando su mente se traslada al pasado, recuerda rencores, envidias y frustraciones, producto de sus vivencias; empero cuando el péndulo de su mente se traslada al lado contrario, entra la emoción perturbadora y los pensamientos de cómo será su vida laboral en la vigencia siguiente, en palabras de mi querido amigo: Javier Alfonso Beltrán Henao, “le genera miedo y ansiedad, se pregunta: ¿tendré mi contrato de trabajo, el próximo año?. ¿el aumento que voy a tener será suficiente para estas reformas que vienen?” Beltrán, JA (2018).

No obstante, llega un momento en que dicho péndulo se detiene en el centro y es ahí cuando el Ser esta en control de su pensamiento, de sus emociones y de acuerdo con el nivel de consciencia que haya desarrollado en su vida (nivel 1, 2,3 o la iluminación N° 4), el individuo puede descubrir que tan solo cuenta con el instante que está viviendo y que si en una sociedad completamente conectada por la tecnología, tiene la capacidad de “apagar la mente” (Tolle, E. 2000); seguramente entenderá el secreto maravilloso de poder escoger sus propios pensamientos y expresarlos a través del lenguaje de una manera asertiva y considerada, para con sus compañeros de trabajo. En otras palabras, aprende a comunicarse con inteligencia emocional; evitando a toda costa herir o maltratar a los demás y siendo generoso en cada uno de sus consideraciones.

Es por esta razón que respetuosamente se sugiere a los empresarios que creen empresas donde su Talento no esté supeditado a péndulos de emociones, sino que generen consciencia del día actual, de la jornada, del hoy, del instante y lo vivan con intensidad; así dejarán de lado las preocupaciones rutinarias y serán más productivos. Dado que, si no se generan estos Ecosistemas Laborales Conscientes, seguirán en el nivel 1 de consciencia, en el que todo lo que sucede en el medio le afecta y no lo deja avanzar.

De otro lado, diversos estudios demuestran como: los Talentos mayores tienen que coexistir en ambientes laborales con los comportamientos humanos de los nuevos funcionarios en las empresas, con base en que las tendencias que se presentan a nivel mundial en relación con la vinculación laboral y su permanencia han cambiado. En este moderno ecosistema laboral, ya no aparece en los formularios de ingreso, solamente las opciones: Hombre y Mujer, sino que existen otras posibilidades de género; al igual que otras aspiraciones laborales y estos aspectos son importantes para que las directivas empresariales generen consciencia en sus Talentos y de esta manera aprendan entre todos a convivir pese a la diferencia generacional.

Es así como, el actual “Nativo Digital” o nuevo Talento, le interesa permanecer muy corto tiempo en un cargo, sin tener en cuenta aspectos tales como: salario, bonificaciones, primas, estabilidad; sino que este nuevo Talento, se interesa más por viajar, conocer, y recibir lo necesario para continuar en su proyecto de libertad laboral. Entonces, surge un nuevo problema: no solamente, la empresa debe fidelizar a los clientes externos, sino también fidelizar a sus clientes internos como lo son: los Jefes y los Talentos, desarrollando en ellos altos niveles de consciencia y pertenencia por la empresa a través de arduos procesos de capacitación en felicidad laboral.

Del mismo modo, estamos frente a una generación que no desea asumir un compromiso de esperar 45 años para recibir una pensión salarial que escasamente le alcance para subsistir. Esta nueva generación es creativa, le gusta el reconocimiento, la fama y el dinero; empero, sin tener que entregar su existencia a la causa de otros (empresas); sino que busca disfrutar del mundo mientras pueda existir. Por lo tanto, se debe tener mucho control emocional por parte de todos los actores empresariales para hacer frente a esta situaciones laborales y contar con un plan de capacitación permanente y migración del conocimiento que permita mantener a diversos Talentos capacitados sobre los distintos procesos que realiza la empresa; y para tal efecto, se requiere mucha conciencia administrativa.

Por lo tanto, la felicidad laboral es un aspecto que traspasa los límites del mundo empresarial y trasciende a la administración de los Estados. En este panorama ya está siendo entendido por los diversos gobiernos del mundo, la necesidad de crear consciencia en la forma de construir ambientes laborales felices para la población en las empresas. Para citar un ejemplo, en el año 2010, Bután fue el primer país en empezar a evidenciar sus índices de Felicidad en la población, esta Nación entendió que la felicidad de sus Talentos, estaba íntimamente ligada al aumento del Producto Interno Bruto (PIB) es decir, a mayor felicidad laboral, obtienen mayor producción y por lo tanto, están certificados como el país más feliz del mundo en la actualidad.

En este orden de ideas, es evidente la necesidad de contar con estrategias eficaces de consciencia en la administración de las empresas, para enfrentar las emociones en el trabajo y las nuevas dinámicas laborales y sociales de la población activa, y en tal sentido, el estudio de la Felicidad Laboral, proporciona al empresario y al Gerente General o CEO herramientas valiosas para fidelizar a su personal, no solo con sus funciones del cargo, sino con la empresa; ya que se sentirá seducido por su labor, respetado y admirado por sus servicios y reconocido en la sociedad como un ser consciente del rol que desempeña para favorecer el desarrollo económico y social de un país.

En suma, es fundamental que los empresarios, sus gerentes, sus Talentos y demás actores del proceso laboral, generen procesos de consciencia para el control de sus emociones y aprendamos a terminar todo nuestro trabajo, antes de querer hacer el de los demás. No se trata de no colaborar, ni de convertirse en insolidarios, solamente consiste en ser capaz de medir muy bien el grado que tienen sus compromisos laborales y cumplirlos con dedicación y esmero; y, cuando los alcance, entonces podrá comprometerse con otros aspectos; sin perder nunca de vista el hecho consciente de que debe dedicar tiempo no laboral exclusivamente a la empresa más importante del mundo; La Familia. Y en cuanto a los nuevos Talentos, debemos aprender a comprenderlos, reconocerlos y convivir con ellos de manera armónica para tratar de fidelizarlos y garantizar la operación de la empresa y por ende el servicio de calidad para la sociedad. Gracias a todos y nos vemos en la próxima entrega para realizar algunos acercamientos sobre el sexto principio de: Humildad y Resiliencia. Hasta entonces y les deseo mucha felicidad laboral.

 

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