La ciudad de Armenia se encuentra en una verdadera encrucijada en casi todos los aspectos y todo debido al derrame de corrupción que no solo sacude a todo el país sino que se ha hecho más evidente y monumental acá en Armenia. Este magnicidio se veía venir, porque el robo y el saqueo al erario público ha sido la constante en todos los gobiernos anteriores, que en su afán de enriquecerse en los 4 años de gobierno obtienen el dividendo necesario para el resto de sus vidas, a costillas de los impuestos que pagamos los colombianos con el sudor de la frente. Nosotros acá en Armenia, deberíamos estar contemplando una hermosa ciudad, sin tanta miseria, con vías que no requieran del famoso Pico y Placa que es solo un sofisma de distracción ante la ineficiencia de los gobernantes de turno de abrir espacios para que la movilidad fluya sin interferencias, con eficientes hospitales, centros de salud, Cuerpo de bomberos, que también aquí no funcionan porque no hay suficiente material de trabajo ni personal que lo atienda en donde los principales cómplices son los concejales ineptos que solo saben de mermelada y cuotas burocráticas, calles y carreras amplias, no como la que están abriendo de SAO a la avenida centenario, estrecha, oficinas públicas agradables y de amplio espacio para llegar a ellas, no como las oficinas de Setta, que son vergonzosas para propios y visitantes o las de la EPA para pagar servicios públicos, huecos en todas partes que se pueden tapar con dinero de caja menor, pero siempre dejan que se deteriore más la ciudad y tantas cosas más, pero la maldita politiquería y el ánimo perverso de robar de estos funcionarios malévolos, cínicos y mentirosos no ha dejado progresar la ciudad. No podemos permitir que se sigan nombrando sujetos afines a estos políticos que se robaron Armenia porque de lo contrario vamos hacia un abismo profundo del cual difícil saldremos algún día. Esperamos un alcalde que no tenga que ver con ninguno de los ladrones que saquearon el fisco municipal, que sea totalmente ajeno a esa clase política grotesca que tenemos en este momento, para que tome cartas en el asunto sobre todo del robo de valorización en donde deben por ética, seriedad, honestidad y responsabilidad devolver los dineros que arbitrariamente cobraron de unas obras sobredimensionadas en altísimos costos y que los ciudadanos armenios no tenemos por qué sufragar ese saqueo económico. Ese cuentico de que son obras de beneficio para la ciudad es chimbo puesto que el tal beneficio se fue a los bolsillos de unos pillos, que sin escrúpulos dizque quieren seguir manejando el negocito desde afuera. Unidos digamos no más políticos corruptos en Armenia, denunciemos y exijamos castigo fulminante para todos estos inicuos dizque representantes del pueblo.
Mario Jiménez C.
Armenia Agosto 20-2018
