Estoy caminando por el centro de Armenia, y a la ya incesante marea humana, entre pilas de mugre y vendedores ambulantes, sobresalen las obras sin terminar de Cielos Abiertos. Se pasó la Navidad y la alcaldía perdió el año. Un “arreglo” que va en contra del diseño original, ganador de la” XVI bienal Panamericana de Arquitectura 2008”. Se despojó el sentido de armonía de una obra arquitectónica, que entregarán sin luminarias, sin el correcto drenaje, y con un paisajismo triste y mediocre. Esto ante la mirada sorda de quienes supervisan los proyectos ¿Por qué son así estas administraciones? Es que acaso no son ustedes armenios y no ven el estado de fealdad de la ciudad. Mientras instalan pomposos anuncios multicolores en el parque Sucre, que se cae a pedazos y que no tiene ni hierba, y nos “regalan” la peor iluminación navideña (568 millones) Deplorable. Pasará igual que con el deprimido de la Constitución que quedó con columnas sin terminar, y el otro regalito que nos dejo el exdirector de planeación municipal (hoy investigado) la impotable “ Rita” de 80 millones de pesos, obra de arte pública a la cual nadie pareció importarle que era un homenaje a la prostitución ( la obra se llama originalmente “ Rita 5.30” basado en un personaje real, una prostituta y posterior regenta, amiga de Grau). Agregando más insulto, al incluir una canasta y mariposa y la absurda intervención de la chica del aerógrafo (amiga intima de la alcaldía y corpocultura) y que a dedo y sin licitación a recibido millones del erario, como también lo hacen ahora con un mural sobre la carrera 19N, otorgada al mismo de siempre y parte de un paquete de obras por valor de 360 millones de pesos que la nueva secretaria de planeación firmo sin hacer uso del instrumento publico de la LICITACIÓN.
¿Y los artistas locales qué? pues que sigan muriendo de hambre, esperando por bolsas y estímulos, que por el solo hecho de afectar su economía, degeneran en obras y proyectos vagos y de baja calidad. Artistas con MIEDO. Al fin y al cabo al empleado de turno ni le importa. Administraciones cómplices del robo a nuestra cultura y pertenencia.
Espejo, espejito. Una persona puede ser el cambio. Ciudades enteras son el reflejo de sus líderes. Bogotá es un caos, falsos diplomas y fallidos metros, alcalde mercader de buses y cemento. Cuando hablamos del Chocó, su hijo emérito, ministro de ambiente, es un ingeniero de minas. Y la Guajira de Oneida y Cambio Radical, ríos secos, niños muertos. Toneladas de carbón.
Pero por acá no nos quedamos atrás. Lupanares, casinos, chance, prostitución y drogadicción. Lugares y hábitos que definen una tendencia y hacen que nuestros marcadores, siempre número uno en lo malo, reflejen esa realidad. El Quindío es el espejo de un solo hombre. Amo y señor de esta región y de su mentalidad. Que como un vampiro absorbió todo lo bueno y nos dejo literalmente en manos del azar. Un hombre que llegó a estas tierras sin cultura alguna y sin cultura nos dejó. De él aprendieron las administraciones de turno (todas ellas directa o indirectamente cuotas del cacique regional) la mejor manera de cómo apropiarse del erario. Espejo somos de una generación sin oportunidades, de una región sin industria y de niños hambrientos y prostituidos. Quindío sin dolientes.
¡FELIZ 2018!
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