Roberto Estefan-Chehab
Fui a visitar al personal de que labora en el Centro de Salud de la universidad del Quindío y reafirme el cariño y el respeto que me inspira todo ese equipo de personas tan dedicadas a servir amorosamente, sin embargo quede pasmado, de verdad, al percatarme que están dedicados a atender a todo tipo de personas, además colocando la vacuna para covid 19 a la población de fase 1 y ninguno de esos trabajadores está vacunado, “porque no reúnen los requisitos de la fase 1, inconcebible y absurdo. Ellos vacunando a todo el que llega, exponiéndose y “no reúnen requisitos”. Cuando no hay claridad, ni quien abogue por asuntos tan claros y asuma responsabilidades como líder dese el mismo gobierno regional, el caso del municipio por ejemplo, sencillamente todo queda al garete: un buen gobernante pega el grito en el cielo, si fuese necesario evitando que todo “pase de agache” a eso yo lo llamaría el síndrome de Pilatos: “se lavan las manos” o “ese muerto no lo cargo yo”, como en el baile de don Goyo. Ayer fui testigo de una estrepitosa caída de un motociclista que clavo la llanta delantera de su moto en uno de los huecasos que hay por la avenida centenario de Armenia – vale decir que cada vez aparecen más – y les cuento, apreciados lectores que a los tres minutos fui yo quien daño la llanta de mi carro en otro boquete de esos: sí, claro señores de la alcaldía, ¿Quién me manda no poner cuidado?, sin embargo, en este caso, si hubiese evitado caer en ese hueco la tragedia estaba cantada pues pasaba una motocicleta por mi lado y la hubiera atropellado. Así se ha vuelto el devenir de los conductores en Armenia y por toda la ciudad. Es increíble y produce mucha emoción negativa, desasosiego y molestia tener a nuestra ciudad tan abandonada. Después me encuentro con un “trancón” por la avenida Bolívar, al llegar al sitio del embotellamiento, todo el problema era un camión repartidor de gaseosas de una marca muy popular que estaba estacionado en plena avenida, descargando y surtiendo a un local de supermercado, en horario de 3 de la tarde. Obviamente, una fila de tres o cuatro carros, parqueados y sin conductor, delante de ese camión aprovechando el “papayaso” y de ahí para bajo varios sitios de esa arteria obstruidos porque ahora, además, es parqueadero. En menos de 20 minutos, toda esa experiencia de caos y anarquía. Y, la cantidad de personas en situación de calle además de los que andan sucios oliendo una botellita de pegante, acercándose amenazantes, sin contar los atracos y los “raponazos” ¿Esa es la Armenia ahora? ¿Eso fue lo que usted ofreció en su campaña, alcalde? Sabemos que le entregaron este caos y la olla pelada, esa es la firma de la corrupción de las pasadas administraciones, pero, si no iba a poder con el municipio, ¿para qué carajos se lanzó y se posesiono? Alcalde: si Avianca va a aumentar las frecuencias, o van a llegar más vacunas o va a hacer un lindo vivero, eso no cambia la urgencia: su gestión no va por ahí, últimamente se la pasa publicando, ¿desde su oficina de prensa o de imagen?, un poco de cosas que en vez de mejorar su imagen, lo están haciendo quedar muy mal: puros “lkes” de amigos y funcionarios cercanos, pero le aseguro que esa no es la opinión del pueblo y entonces aterrice. Y si no puede, mejor renuncie porque es lo más honesto. Quizás usted “comió cuento” y ahora esta embalado con una ciudad que lo mira ya casi sin esperanza y rodeado de “nadie” al tener que responder por usted.
