Desigualdad econopolítica

14 octubre 2023 11:40 pm

Compartir:

Guillermo Salazar Jiménez

Unos amigos participaron con atención de la discusión, otros desinteresados del tema conversaron en voz baja. Sobre la desigualdad social, Rusbel Caminante comentó que la desigualdad económica afecta directamente a los pobres, quiénes justamente son la mayoría analfabetas políticos. Agregó que en Colombia los pobres son explotados por los dueños del poder económico y los subyugan a través de sus aliados políticos. Es decir, la desigualdad padecida no solo es la enorme disparidad de los ingresos o no gozar del bienestar social, sino en los obstáculos sufridos para disfrutar las leyes o alcanzar, mediante el voto, cargos públicos.

“La libertad política sin igualdad económica es una pretensión, un fraude, una mentira; y los trabajadores no quieren mentiras”, Mijaíl Bakunin, filósofo y político ruso, recordó a Juanita Lectora la verdad reconocida sobre la desigualdad económica que sufre la mayoría de los colombianos, correspondiente con la desigualdad política. Agregó: la minoría que goza de la riqueza son los mismos que patrocinan a sus aliados políticos, quienes determinan las leyes para mantener sus privilegios.

Aunque pareciera simple, destacó uno de los participantes de la tertulia, resulta importante hablar de desigualdad econopolítica, con la discusión sobre las reformas sociales que buscan disminuir la desigualdad económica. Pronto se realizarán las elecciones, que permitirán enfrentar la desigualdad política, con la adecuada selección de gobernadores, alcaldes, diputados y concejales.

Rusbel Caminante se apoyó en el filósofo y maestro estadounidense de derecho constitucional Ronald Dworking para decir que la desigualdad económica no solo se valora por la concentración de la riqueza, también por el grado de bienestar de los ciudadanos, “determinada por la cantidad de recursos de que dispone el individuo para la realización de sus fines”. Añadió que los dirigentes económicos y políticos hablan de la igualdad de derechos, con la pretensión de validar, en abstracto, iguales posibilidades para los colombianos. Pero la realidad es diferente, la democracia debería ser la estrategia posible de distribuir el poder económico y político.

A la mayoría del pueblo colombiano se le restringe la participación en formular las leyes, comentó otro participante, igual, como afirmó el maestro Dworking, se les niega la posibilidad de “que todas ellas son igualmente elegibles para ocupar los cargos públicos que se determinan por medio del sufragio popular.”

Juanita Lectora expuso sobre lo injusto de tratar como iguales a los colombianos que no lo son, porque la mayoría no disponen de iguales posibilidades de alcanzar una situación económica y política igualitaria. Recalcó la idea de apoyar las reformas sociales propuestas porque pretenden equilibrar la desigualdad económica, de un lado, y determinar políticas públicas de participación e integración social, de otro. Recordó sus tiempos de universitaria, con el maestro Eduardo Galeano, en Las venas abiertas de América Latina: La fuerza del conjunto del sistema imperialista descansa en la necesaria desigualdad de las partes que lo forman, y esa desigualdad asume magnitudes cada vez más dramáticas. La desigualdad econopolítica es una realidad que es necesario enfrentar al mismo tiempo, concluyó con el grafiti, “La desigualdad social es más violenta que cualquier protesta.”

 

 

 

 

 

 

 

El Quindiano le recomienda

Anuncio intermedio contenido