La Vitrina Turística de Anato, punto de encuentro anual del sector turístico nacional con sus pares en el resto del mundo, es parte de mi vida profesional desde su inicio en Popayán hace 39 ediciones. Cómo pesan tantos años, recuerdo al comienzo, cuando este evento no era lo de hoy, se concentraba en medio pabellón, no habían ruedas de negocios, no vivíamos pegados del bendito teléfono para hacer seguimiento a las citas y bueno, un sinfín de tareas que de verdad hacen que este magnífico evento anual esté a la altura de otros como FITUR, Madrid; ITB, Berlín; World Travel Mart, Londres, por nombrar unos cuantos.
Me voy a permitir extractar de una entrevista al ministro José Manuel Restrepo su respuesta a la pregunta que le hiciera el periodista sobre qué le espera al turismo en los próximos años; esto respondió:
“En turismo debemos acogernos a las tendencias mundiales, las cuales se refieren a un sector que sea responsable, accesible, sostenible e incluyente. Por lo tanto, en Colombia debemos empezar a tomar posiciones y a tener visión de largo plazo. Además de pensar en cómo disminuimos, de manera considerable, los efectos negativos del cambio climático.
En 2020, realizaremos el diagnóstico de las principales problemáticas que enfrenta el sector. Vamos a desarrollar un trabajo colectivo, donde se generen espacios de participación y socialización con actores del sector público y privado, gremios, la academia, la sociedad civil y las comunidades, entre otros.”
Como en ocasiones anteriores, el stand del Quindío estuvo muy visitado al punto tal que estimo se le puede hacer difícil a un cliente –un agente de viajes— apreciar todo lo que el destino tiene para ofrecer en lo que respecta a atractivos y nuevos productos. Considero que en ocasiones se hace difícil sostener un dialogo comercial por la congestión y uno que otro distractor. Observando otros stands, me da envidia de la buena al ver como han segmentado en perfecta armonía a operadores, atracciones de consumo masivo, tour operadores y otros de manera tal que el objeto para el cual están allí se cumpla a cabalidad, insto a mis colegas a que tengan siempre en mente que sus clientes allí son las agencias y no el consumidor final por lo tanto no hay que pensar que porque el stand estuvo todos los días abarrotado se lograron buenas ventas.
El negocio grande se logra en las citas pre establecidas; desde el miércoles pm hasta el viernes am, en las ruedas de negocios, tuve la ocasión de participar junto con el propietario del hotel que representé y debo confesar, el nivel de los compradores, 1A; del Quindío no fueron muchos los que participaron en las citas de negocios, como anécdota, del 100% de las citas de negocios cumplidas por nosotros, el 70% fueron en Inglés con compradores de Europa, Asia y Norte América, me regocijé sobremanera al ver cómo preguntan por el Eje Cafetero, Coffee Axis etc., Ellos no saben de Quindio ni de Risaralda ni de Caldas y mucho menos de Calarcá, Buenavista y otros municipios; esto para que de una vez por todas en sus estrategias de promoción internacional refieran que estamos ubicados en la zona cafetera, o en la del Paisaje Cultural Cafetero. Por muchas razones más es por lo cual debemos unirnos alrededor de la RAP Eje Cafetero Turística. ¿Me acompañan en esta campaña?
Hasta la próxima.