Por Iván Restrepo
La semana anterior, en compañía de dos hermanas que residen en el extranjero desde hace décadas, decidimos hacer el viaje desde Armenia hasta Cajamarca, ida y regreso, para darnos un banquete de nuevas obras del Cruce de la Cordillera Central, el tramo de carretera más publicitado en los últimos días en el país, dada su importancia para la economía y desarrollo de Colombia. Quería conocer la opinión de dos personas que por muchos años no transitaban por esta vía, y me resultó muy edificante escuchar de labios de ellas esas historias de cuando estábamos pequeños: de carros de balineras, de las recogidas del musgo para estas épocas navideñas (por supuesto, tiempos antes de que fuéramos conscientes del daño ambiental que estas prácticas generan), y en especial del paso por la ermita de la Virgen Negra (sitio obligado de veneración por parte de camioneros desde siempre). Precisamente, y con respecto a la imagen de la venerada virgen, hace unos años se me ocurrió darme la licencia de re-bautizar esta imagen de la virgen negra como la “Michael Jackson”, eso desde el momento en el que alguien, no sabemos quién, la pintó de blanco. En fin, una costumbre muy de la zona si nos atenemos a los que pintan esculturas y monumentos dizque “porque los veían muy descuidados”.
Volviendo a la vía, al comienzo del ascenso en las goteras de Versalles en Calarcá, lo primero que uno como conductor debe de descartar ahora es el no poder adelantar la lenta tractomula en cualquiera de las curvas. Entendible, crecimos con la práctica de la precaución para rebasar otro carro en estas circunstancias. a mi parecer, en cosa de un kilómetro ya está uno acostumbrado a las nuevas condiciones de la vía y es allí cuando el viaje se torna placentero. Amigo conductor, no sienta temor, despacito, despacito puede NO REBASAR EN CURVA. La sensación es placentera, es así cuando fácilmente puede acortarse el tiempo de viaje para el tramo Armenia – Cajamarca, en una hora a hora y cuarto aproximadamente.
Hay un ejercicio ameno, para llevar a cabo y disfrutar el cruce: Comenzar a memorizar los nombres de los túneles y viaductos: Ocelote; Tapir; Mono Aullador; Loro Orejiamarillo; Los Venados; Las Mariposas. Ahí les dejo la tarea para memorizar los demás. Cada uno está además muy bien señalizado, acompañado cada uno de una bella pintura alusiva a su nombre.
Algo que pude notar en ambos trayectos es la ausencia de puntos de apreciación del paisaje. Durante el trayecto de Armenia a Cajamarca sobresalen las imponentes palmas de cera y en general el paisaje quindiano. Sin embargo, no hay sitio alguno para parar a tomarse un café, una selfie y, mucho mas importante, para acceder a un baño público. Al parecer de muchos, aparte del disfrute de las obras, es menos lo que se puede apreciar en este tramo comparado con el tramo de regreso Cajamarca – Armenia, en donde se puede disfrutar, al estilo de otrora, de todos los productos emblemáticos que venden por ejemplo en “La Paloma” ubicado al lado derecho de la vía desde hace muchas décadas, y el cual es tristemente “víctima” de estas grandes obras, al verse posiblemente reducida su clientela al 50% del mercado al que antes accedía. Se espera sin embargo que esto se le vea compensado con el seguro incremento del volumen de tráfico automotor por la vía, el cual por estos días ya se estima entre 30 y 40%. Ya veremos que pasará por los días de la alta temporada.
Desde el punto de vista turístico, se pudo haber pensado en unos puntos de apreciación paisajística dotados con terrazas de estacionamientos en donde los viajeros, además de la contemplación del imponente paisaje del Quindío, Risaralda y Norte del Valle, puedan disfrutar de una comida ligera, de un café y de unos baños públicos dotados de la más alta tecnología. Solo nos queda esperar que INVIAS, en asocio con las autoridades de Calarcá, le den vía libre a la Mega Estación Turística de Versalles.
De los sectores del turismo que se verán altamente beneficiados destacarán los parques temáticos, el Jardín Botánico del Quindío, los municipios de Salento y Filandia, los municipios cordilleranos y por supuesto Armenia, que se verá beneficiada con el volumen de posibles compradores navideños de Ibagué, Girardot y vecindades, quienes aprovecharan el paseo para hacer compras en nuestra Capital Armenia.
Por ahora solo nos queda esperar el desarrollo de las obras en el tramo Ibagué – Melgar para así quedar a 4 horas y cuarto de Bogotá. Amanecerá y veremos
BREVES DEL QUINDIO: Por lo que alcancé a leer en redes sociales este domingo 12 de diciembre, es grande el desconcierto y sentido de frustración de la ciudadanía calarqueña a raíz de una cabalgata que se llevó a cabo en la ciudad este pasado sábado 11. No se entiende cómo en una ciudad patas arriba por causa de unas obras de adecuamiento de las vías, le dan vía libre a un evento como este. No es que esté en contra de las obras para el mejoramiento de la ciudad; lo criticable es el modo en que estas obras se están llevando a cabo ya que no se ve el mas mínimo asomo de planeación. Un ejemplo, cierran una vía y el conductor solo se percata una vez está metido en la calle, cuando lo lógico es advertir: VIA CERRADA desde la esquina anterior. Esto de una cabalgata, privilegiando los intereses y gustos de una minoría en perjuicio de muchos es verdaderamente criticable. Y ni qué decir del maltrato a los equinos: la bulla, congestión, hambre etc.
Me quedo como Condorito: ¡Plop!
Hasta la próxima,