Evocación de Nelson Sabogal, compañero de pupitre escolar

23 junio 2024 3:37 am
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Por Oscar Jiménez Leal

Ya desde las aulas escolares de las primeras letras, donde  compartíamos  pupitre, Nelson hacía gala de sus inclinaciones por la transmisión de noticias deportivas. Refugiado en un rincón del salón  de clase, en las horas libres,  formaba un triángulo con hilos de alambre apuntillados en cada pared de los cuales colgaba un frasco vacío de tinta para escribir con pluma y,  desde allí, cual cabina con micrófono, con una impecable dicción, perfecta vocalización y un bello timbre de voz, -caracteres que conservaría hasta el final de sus días-, daba rienda suelta a la transmisión  de un imaginario y apasionado partido de futbol en donde curiosamente jugaba deportes Quindío que siempre terminaba ganando por goleada, sin importar cuál fuese  su rival. Por ello, cuando todos sus condiscípulos y amigos ignorábamos que ocupación vocacional nos habría de deparar el destino, Nelson Sabogal Vásquez desde entonces estaba seguro y nosotros también, de que sería el gran periodista que en efecto fue.

Sin embargo,  oficialmente se inició en el periodismo radial en los años 60 de la mano de Germán Gómez Ospina, el reconocido periodista que dirigía las noticias y los comentarios de la “Voz de Calarcá”, bajo el la tutela empresarial de Chila Latorre Mejía. Allí le correspondió alternar con los también prestigiosos periodistas Álvaro Hoyos Cardona, Octavio Ospina Pérez y Jorge Eliécer Orozco Dávila, quien hacía sus primeros pinitos del oficio.

Con su apoyo incondicional en las comunicaciones libramos diversas campañas cívicas, sociales y políticas en pro de lo considerábamos los altos intereses de Calarcá. Así por ejemplo, cuando una gran mayoría de dirigentes calarqueños se opuso, de manera radical, a la creación del departamento del Quindío, por lealtad con Caldas y por una malentendida rivalidad con Armenia, hubimos de afrontar la impopular defensa de la independencia y la separación con la convicción de que ello contribuiría al desarrollo y progreso de la comunidad.  La historia del Quindío nos daría luego la razón.

El acuerdo de La Castalia

Y cuando una vez creado el departamento y posesionado el gobernador Ancízar López un sector del Concejo lo declaró persona no grata, hubimos de acudir al Jefe Liberal Martiniano Montoya, junto con Armando Patiño y otros dirigentes  a convencerlo de la inutilidad de la declaración y del daño que nos causaría como sociedad, de no mediar un intento de reconciliación con el gobernante y con la ciudadanía de Armenia y del Quindío. En tales condiciones se  realizó el Acuerdo de “La Castalía”, escenificado en la bella hacienda de propiedad del Jefe Montoya, donde se le hizo un homenaje al nuevo gobernante y se establecieron las bases para tan anhelada convivencia en los mejores términos. Después de los cual fuimos elegidos miembros del concejo municipal, en donde luchamos por la integración con el nuevo departamento y coadyuvamos a la reconciliación de la comunidad quindiana. En ese recinto el concejal Nelson Sabogal Vásquez, se desempeñó con gran brillo, hasta el punto que en las barras se decía de él que era capaz de improvisar, con suma elocuencia, un discurso de dos horas sobre un tema que ignoraba, solo para impedir, sin dar lugar a interpelaciones, el levantamiento de la sesión.

En Radio Ciudad Milagro

Posteriormente, cuando varios ciudadanos encabezados por los dirigentes Ancízar López, Jesús Antonio Niño y Efraím Castro fundaron Radio Ciudad Milagro, Nelson fue reclutado como presentador estrella del nuevo medio de comunicación. Desde esa tribuna dirigió por largo tiempo el noticiero Sucesos y Comentarios que llegó a copar gran parte de la sintonía regional, por la veracidad de las noticias y la censura implacable a las irregularidades cometidas por algunos funcionarios públicos, pues observaba con fidelidad absoluta el apotegma ético según el cual la información es sagrada pero el comentario es libre. De ahí su prestigio y general acogida.

Desempeñó con especial eficacia y rectitud sin sombras varios cargos públicos como director regional de Deportes y alcalde del Municipio de Córdoba, con breves pausas a su quehacer periodístico que siempre honró con su ejercicio inmaculado. No obstante, sus mayores cualidades ciudadanas fueron el amor a la tierra que nos vio nacer y a los suyos, y el tributo a la amistad de la cual tuve el privilegio de disfrutar.

La fiesta de la amista infinita

Por eso, ahora que nos precedió en el viaje ineluctable a regiones ignotas, esperamos reencontrarlo para celebrar la fiesta de la amistad sincera e infinita. En el entretanto, extendemos abrazo solidario a su familia, y a sus amigos por su ausencia, y a la comunidad quindiana por el vacío que deja en el espectro radiofónico la desaparición de su líder ejemplar.

Bogotá 22 de junio de 2024.

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