Álvaro Ayala T.
Sería interesante preguntarles a los calvos colombianos si irían al médico que le hizo el implante de cabello al presidente Gustavo Petro Urrego.
Es importante aclarar que por razones económicas los alopécicos nacionales no están en condiciones de acudir a este tipo de especialistas. En promedio un procedimiento de esta clase tiene un valor de 30 millones de pesos, y los más reputados cobran por encima de cincuenta. No creemos que se la haya practicado a través de la EPS. Nadie lo vio haciendo fila y si la brincó es trampa. Desconocemos si fue cirugía ambulatoria, con anestesia local y con tres días de incapacidad. Lo único que se filtró a su grupo cercano es que durante un año no puede jugar fútbol. Si cabecea un balón puede causarle daños irreparables.
Tal vez el ministro de hacienda, Ricardo Bonilla implante el día sin IVA para las cirugías estéticas y lo incluya en un articulado de la reforma a la salud. Ese detalle puede bajar el precio y aumentar el número de candidatos (a injertos capilares).
No entendemos cómo ponen de ministro de hacienda a alguien que nunca ha creado un empleo. A una persona que no apoya a los empresarios, comerciantes ni al pueblo. Porfiadamente insiste en que el día sin IVA no es viable porque solo favorece los productos extranjeros. Señor ministro, esos productos extranjeros fueron nacionalizados y pagaron el respectivo impuesto. Los grandes almacenes y el comercio en general se benefician con las ventas. Eso es lo que hay, eso es lo que venden.
No es descabellado preguntarles al presidente Petro y al ministro Bonilla, si están en condiciones de ser pacientes del doctor Guillermo Alfonso Jaramillo. Damos por entendido que ninguno de los tres lo haría a través de las extintas EPS.
El jefe de Estado ha incurrido en una serie de errores no forzados durante su administración, pero en cuestiones estéticas va a la vanguardia. Incluso, sería bueno que opinaran en redes sociales sobre la intervención y dijeran si mejoró o empeoró.
Quien diga que ser calvo es sexi, es como afirmar que los impuestos son buenos y saludables. Preferiría gastar plata en champú todos los días y no ahorrar en ese renglón, aseguran los que viven con ese atractivo.
A hoy, es momento de conocer el resultado estético y destapar el nombre del médico. Muy aburridor que se metan en asuntos particulares y privados de las personas. Aunque un jefe de Estado permanentemente está sometido al qué dirán. Todos sus actos deben ser de conocimiento público para que no le digan que siempre vive de gorra.