El 12 de octubre es la fecha que analizan los campesinos para realizar una gran movilización nacional con el fin de sentar su voz de rechazo a los incumplimientos del gobierno central.
Según Dimas Alberto Arias, miembro de la junta directiva nacional de Dignidad Agropecuaria, el pasado 1 de septiembre, durante la runión del movimiento en Bogotá, se analizaron los casos más críticos: maiceros, arroceros y plataneros, que están sumidos en una crisis económica.
“A los arroceros el Ministerio de Agricultura les prometió una prima por la venta de cada carga, pero hasta ahora no se las han pagado: A pesar de que no supera los $20.000”, dice el dirigente al tiempo que argumenta que con los maiceros la situación es más compleja a lo que agrega:
“En el marco del programa Colombia Siembra, los incentivaron a ampliar sus áreas de producción, pero cuando salieron a vender la cosecha el mercado estaba inundado de maíz extranjero. Entonces el ministerio prometió ayudarles a conseguir créditos para guardar el maíz, mientras se agotaban las existencias extranjeras, pero les incumplió, argumentando que primero debían pagar los créditos de siembra, así que están vendiendo a pérdida para cumplir con las primeras obligaciones adquiridas”.
Entre tanto, los productores de plátano temen por el bajo precio del mercado, como consecuencia del producto que llega ilegalmente desde Ecuador.
“El plátano quindiano ya no es apetecido en Bogotá, pero, y si así lo fuera, ya no es rentable”, afirma.
Mítines o toma de carreteras
Durante lo que resta de septiembre, los dirigentes del movimiento socializarán la propuesta con las bases campesinas en cada uno de sus departamentos.
“Aquí en el Quindío, la primera reunión la llevamos a cabo en Filandia, la próxima será en Quimbaya y próximamente en los demás municipios”, manifiesta.
Una vez culmine esta etapa, la junta directiva se reunirá en Bogotá para definir la clase de movilización. “Algunos han propuesto salir a las carreteras, otros tomarse las vías en las ciudades y otros hacer mítines frente a las gobernaciones”, concluye Dimas Alberto Arias.