De repente en todo el mundo reina la oscuridad. Miles de años de evolución sobre la faz de la tierra se van a la basura en menos de un minuto y nadie tiene la culpa, porque en esta historia no hay responsables para señalar. Muy pocos saben que está pasando. No hay un plan terrorista tan perfecto, efectivo y de semejante magnitud como para hacer tal daño. No hay forma de juzgar a los radicales musulmanes, anarquistas, guerrillas del tercer mundo y mucho menos ejércitos oficiales que pelean guerras por encargo.
Tampoco son los hackers de Anonymous los que dejan el planeta entero en tinieblas con toda su tecnología inservible hasta nueva orden. Simplemente lo que le pasa a la humanidad es el resultado de una tormenta solar de categoría X9 ocurrida el 11 de abril del 2018, o al menos eso se reza el planteamiento de la producción.
A partir de esta introducción “El Gran Apagón”, como se llama esta historia, nos va llevando por diferentes relatos en distintos países a través de varios personajes. En el menú se incluyen presidentes que sabían que la tormenta iba a ocurrir pero se cruzaron de brazos junto a ministros, empresarios patrocinadores y claro, los banqueros que no faltan, porque era más sabio ser inútil que proactivo. Al menos más conveniente.
También hay periodistas independientes entre los protagonistas, quienes descubren en esa edad de piedra obligatoria, el plan de contingencia oculto a las masas para que las elites logren sobrevivir con garantías y comodidades mientras impera el caos en las calles. Y en el último escalón tenemos ciudadanos del común y corriente que en los rincones más olvidados de la geografía, sin agua, alimentos ni futuro prometedor, se las tienen que arreglar solos o en comunidad para que el estado de anarquía e impunidad no les pase cuenta de cobro.
Hasta ahí el futuro distópico de esta producción no dice nada nuevo, aunque sin duda suena muy interesante ver como y porque van pasando las cosas que a veces se entrelazan. El punto es que no estamos comentando una película. Tampoco un libro con millonarias ventas y promesa de saga. No es una serie de televisión próxima a estrenarse y que augura infinitas temporadas. No. Todo lo que concierne a lo dicho sobre la historia del El Gran Apagón hasta este instante del texto, pertenece a un podcast. Si. Así como lo leen. Un podcast de lo mejor y más atractivo que se ha realizado en los últimos años. Una producción radial de una calidad técnica impecable, de un nivel actoral exquisito, de un guion fascinante y una dirección acertada.
El Gran Apagón nos trae varias preguntas. ¿Cómo un podcast logra mantenernos pegados a los audífonos sin querer dejar de saber que hay en cada capítulo? Que por cierto no duran más de 20 minutos en la primera temporada y 25 en la segunda. Creería que la respuesta es porque la trama nos muestra a un escenario que no es descabellado pues ya sucedió en New York en 1977, y también porque nos atrae el caos como modo de alimentar alter egos y frustraciones.
Nos gusta porque plantea la hipótesis posible de ¿Qué pasaría si nos quedáramos sin tecnología por un largo periodo de tiempo, siendo que ya somos adictos directos o indirectos al celular, internet, televisión, radio, GPS, bombillos y autos inteligentes? Pues este podcast nos deja la nada como respuesta. Solo oscuridad y hablar con el prójimo como solíamos hacerlo antes cuando nos mirábamos a los ojos.
El gran apagón nos gusta porque es ciencia ficción con disciplina y rigor. Es el espejo que muestra lo efímero de nuestras vanidades, la bajeza de nuestros instintos y la crueldad, a toda costa, cuando buscamos sobrevivir o sobrevivir en el peor de los escenarios. Este podcast es un relato sobre el fin del mundo hasta que la energía regrese y tengamos que volver a conservar la compostura social, porque a la luz, todos los defectos de la humanidad saltan a la vista.
Y otra pregunta para terminar. ¿Es probable que en una era tan visual y digital, esta producción nos lleve de nuevo a la época de las radionovelas como en los años 30, 40 y 50 que disfrutaban los abuelos? Es totalmente probable y está pasando. Y lo es porque los ingredientes se conjugan en ritmos, melodías, mezclas de sonido perfectas y dramas bien llevados de episodio en episodio, dejando ganchos que se van juntando entre finales y comienzos. Eslabones que queremos unir sin parar.
El podcast de El gran apagón es una excelente historia escrita por el guionista español José Antonio Pérez y dirigida por su compatriota Ana Alonso, para la cadena ser de España y que la encuentran en la pagina www.podiumpodcast.com/, totalmente gratis.
Que la disfruten.
Robinson Castañeda.