Un nuevo ingrediente surgió dentro del alboroto que despertó la contratación multimillonaria de Fernando Medellín para prestar servicios de asesoría a la administración del sacerdote Carlos Eduardo Osorio Buriticá
En este asunto, la Contraloría General del Departamento inició una investigación para ver si se infringieron normas legales y tomar las decisiones del caso.
Hace pocos días, la senadora Claudia López expresó públicamente que en Quindío el 90 % de los contratos son adjudicados "a dedo" y recriminó al gobernador Carlos Eduardo Osorio Buriticá por esa práctica, a la vez que recordó que ella lo había acompañado en la campaña electoral para buscar su elección como mandatario.
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Entonces, surgió el contrato que suscribió el gobernador con Fernando Medellín, en cuantía de $166 millones de pesos para prestar asesoría durante cinco meses, asignación que fue calificada como escandalosa pues al promediar esa cantidad, el contratista gana mensualmente más que el mandatario de los quindianos.
Luego, la secretaria juridica de la administración departamental expidió un comunicado en el que afirmó que se abrió un concurso en el que participaron otra personas y que el ganador fue Medellín al presentar las condiciones más favorables para la administración seccional, y que el contratista tiene el compromiso de nombrar y pagar al personal que requiere para el cumplimiento del contrato.
