Se tenía que dar un fenómeno de corrupción, como el caso Odebrecht, para que en Colombia se dieran cuenta las Ías (Organismos de Control) que tenían unas funciones que cumplir. Se entregaron dineros de Odebrecht a las dos campañas políticas que se disputaron la presidencia de la república en las elecciones del 2014 y en la del presidente del 2010. Ya se había destapado el escándalo de Reficar. Se dio el escandalo del exvicefiscal que dio origen al de los magistrados y exmagistrados de la Corte Suprema, se investigan los sobornados por soborno, es decir, los congresistas. En fin, las Ías entonces empezaron ha manifestarse al respecto, prometiendo investigaciones exhaustivas.

El periodismos también alerta a las Ías, pues se ha dado a la tarea de destapar muchas de las ollas podridas de la corrupción en los entes del Estado. Se hacen grandes titulares, se dan los nombres de los corruptos y crean por un momento una gran expectativa en la opinión

Las investigaciones de las campañas políticas a la presidencia, están dormidas, pasaron a segundo plano, lo mismo que las de Reficar, lo mismo que las del magistrado Jorge Pretelt y, en fin, el país irá olvidando los escándalos, que se van camuflando con nuevos escándalos, y nos preguntamos ¿y la prensa qué?

Las investigaciones de carácter penal en contra de los magistrado de la Corte Suprema deja muy mal parada a la justicia en Colombia. Diría cualquier ciudadano desprevenido, ¿si así es el papá cómo serán los hijos? Y es que se llega a pensar que muchos de los funcionarios públicos, presidentes, ministros, gobernadores, alcaldes y demás que les siguen en jerarquía y mando, no están en una cárcel, por la forma como se manejan los sobornos con dinero o en favores ante las fiscales y los jueces

En la región se han dejado de realizar investigaciones contra funcionarios que fueron sancionados por la procuraduría de Alejandro Ordóñez, y que las sanciones tiene que ver con conductas que se tipifican claramente en el Código Penal. No se sabe ´porque razón estas investigaciones están durmiendo el sueño de los justos. El más de malas fue el “rey David”, se escucha decir en la calle.

Hoy una Fiscalía señalada, que con el afán de reestablecer el prestigio y mostrando algo de vergüenza con la ciudadanía, ha iniciado procesos contra la exgobernadora Sandra Paola Hurtado, otra Ía está investigando a la misma gobernadora y dos de los que fueron sus funcionarios por faltas en el desempeño de sus cargo. Se inició una investigación contra el cura, perdón el gobernador, porque para las Ías es necesario hacer ver que se cumplen con el deber.

Que se desempolven otros casos, de alcaldes anteriores, gerentes de Empresas Públicas de Armenia y se inicien investigaciones contra concejales que sin escrúpulos votaron el Plan de Ordenamiento Territorial de Armenia, a sabiendas de que era abiertamente contrario a la ley, delinquieron. La ignorancia no exime el cumplimiento de la ley, ni al funcionario en cumplimiento de sus funciones.

Que no sea solamente en la región que se desempolven los procesos, que sea en todo el país, que no se hagan los de la oreja mocha.

Y la prensa, que lo que inicie, lo termine, cuando se denuncie se hagan los seguimientos de cada denuncia, para que no queden impunes los delitos, y para que los delincuentes no sigan gozando de su poderío. O los inocentes puedan limpiar sus nombres.