Caciques del Quindío lo tuvo todo para obtener el título de la temporada del fútbol de salón profesional, pero en tiempo extra un error no le permitió cerrar la noche con broche de oro.
Los quindianos debían ganar el juego y así lo hicieron, mostrando seguridad y contundencia ante un rival que esperó la arremetida cafetera. No había transcurrido el minuto de juego y ya Caciques se iba en ventaja a través de Kevin Pineda era el 1 x 0, sin embargo Monterrosa igualó ante la sorpresa de la fanaticada que en gran número asistió, pero que no llenó las graderías del Coliseo del Sur.
Los locales jugaban mejor y de los pies de Pinilla, Abril, Colina y Pineda se comenzaron a fabricar jugadas de lujo y la ventaja en el marcador se hacía notar en favor de los dirigidos por Cesar Pineda hasta concretar un 10-3 definitivo.
John Pinilla considerado en algún momento el mejor jugador del mundo se convirtió en la figura del cotejo marcó 4 goles, Kevin Pineda hizo 3 y Diego Abril, Marco Colina y Cardona se reportaron cada uno con dé a gol.
Muy superior Caciques comenzó a rotar el grupo para darle descanso, pues con el resultado tan amplio era dejar descansar a sus jugadores titulares y reservarlos para el juego extra de 10 minutos y que definía el título, lo propio hizo el entrenador de Visionarios.
Con un contundente 10-3 Caciques hacía pensar que en ese “partido adicional” pasaba de largo y se quedaba con el campeonato soñado.
Pero comenzando ese período un descuido en marca le permitió a la vista poner el 1 a 0, el coliseo se enmudeció y el desespero empezó a rondar en los jugadores que llegaban con todo a pórtico rival pero no lograban vencer la resistencia del “mañoso” portero Monterrosa que aprovechaba cualquier momento para tirarse al piso y hacerse el lesionado.
Aumentaba la ansiedad del local que veía como esos casi 9 minutos restantes pasaban y pasaban y no llegaba el gol de la igualdad, que por los menos le permitiera al mejor equipo a través de la temporada, llegar a una definición desde el punto penal, cosa que no ocurrió.
El partido llegó a su final y Visionarios de Sincelejo se quedó con el título del fútbol de salón profesional de la temporada, ante la tristeza de la gente del Quindío que vio cómo otra vez el tan anhelado trofeo de campeón le era esquivo.