El Quindío registró la menor tasa de mortalidad infantil entre los 23 departamentos analizados, seguido de Cundinamarca y Valle, en contraste con La Guajira y Chocó, según los resultados del Índice Sintético de Calidad de Vida (Iscv) que empezó a medir la Cámara de Comercio de Cali.
Los resultados del estudio en 2016 -el año analizado- muestran que la esperanza de vida es uno de los indicadores más importantes para evaluar la salud y la calidad de vida de una región.
Este índice tuvo en cuenta 20 variables agrupadas en las dimensiones de condiciones básicas, oportunidades económicas y capital humano que inciden sobre la probabilidad que las personas puedan disfrutar de una mejor calidad de vida; entre esas variables se consideraron servicios públicos, salud, pensión, bancarización, educación, mortalidad infantil y embarazos adolescentes.
El informe que analizó 23 departamentos del país señala:
“Los resultados evidencian la gran heterogeneidad de condiciones de entorno entre los departamentos colombianos y permiten orientar y priorizar los programas y políticas públicas que podrían contribuir de forma más efectiva a mejorar la calidad de vida en cada región”.
Los departamentos del Eje Cafetero están en las primeras siete posiciones según el Índice Sintético de Calidad de Vida (Iscv); estos territorios, al igual que el Valle, disponen de estructuras productivas relativamente diversificadas y niveles de urbanización superiores al 70 por ciento en el 2016”, indica el informe.