Luciano, en un sándwich

11 enero 2018 8:12 pm

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El representante a la Cámara por el Quindío, el liberal Luciano Grisales Londoño fue metido en un sándwich que le ha costado mucho trabajo aclarar. La pelea del alcalde de Armenia Carlos Mario Álvarez con la dirigente liberal Luz Piedad Valencia puso a Luciano Grisales entre la espada y la pared, pues no quiere dejar de apoyar ni al uno ni a la otra. Sin embargo, las decisiones políticas de los amigos del alcalde lo han puesto en una situación incómoda. Ellos, los amigos del alcalde, apoyan a Luciano, pero no a Luz Piedad para Senado, sino a un antioqueño, Julián Bedoya. Los afiches que están apareciendo donde están Luciano y Bedoya, incomodan a Luz Piedad. Sin embargo, Luciano Grisales ha manifestado que él está con Luz Piedad Valencia para Senado de la República, por gratitud y por quindianidad, y no con el señor Bedoya.

 

La misma falta del exalcalde Gemay, en la gobernación

La Procuraduría Provincial de Armenia destituyó e inhabilitó por 12 años al exalcalde de Circasia Gemay Adolfo Arias Mora, por haber firmado un contrato con Javier Alonso Pineda Patiño, para que ejerciera unas funciones en la comisaría de familia de esta localidad. El 'pecado' de Arias Mora es que no cayó en la cuenta que el contratista era hermano del contralor departamental de entonces, Jorge Enrique Pineda Patiño. Lo que nadie ha dicho aún es que este contratista Javier Alonso Pineda Patiño estuvo vinculado también, en la misma condición de contratista, a la gobernación del Quindío regentada por la exgobernadora Sandra Paola Hurtado. Y no fue en un tiempo diferente, claro está, sino en el mismo momento cuando su hermano Jorge Enrique era contralor departamental. Se trata pues de la tipificación de la misma falta disciplinaria que cometió el exacalde Arias Mora, en este caso, en cabeza de la exgobernadora Hurtado y, sin embargo, sobre este particular no se ha iniciado ninguna acción en la Procuraduría.

 

El Quindío en la A

A propósito de la campañan del candidato al Senado por el Centro Democrático Hernando Márquez, cuyo eslogan es El Quindío para la A, se ha conocido que el otro Hernando, el Ángel, supuesto dueño del equipo Deportes Quindío, les ofreció a los jugadores jugosos premios para que ganaran los partidos de los cuartos de final y poder disputar la entrada a la catogoría primera del fútbol profesional colombiano. Las goleadas que sufrió el equipo cafetero, tanto en Villavicencio como en Armenia, a manos del onceno Llaneros F.C., fueron hechos fortuitos del fútbol, y no manipulación del empresario para quedarse en la B. No estamos autorizados para dar las cifras de los premios, pero para futbolistas que devengan bajos salarios como los del equipo local, les aseguramos que eran muy buenos los premios, podemos ratificar, que jugosos.

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