Las obras de refacción y mejoramiento del colegio Nacional Jesús María Ocampo tienen un avance del 50 %, según dijeron delegado de la constructora Mota-Engil, que visitaron las infraestructuras en compañía de la comunidad docente, delegados de la interventoría y funcionarios de la secretaría de Educación.
Álvaro Lozano Ospina, rector de la institución educativa, dijo que queda a la expectativa del cumplimiento y las fechas de culminación de la obra en consideración que se ha aplazado en diferentes oportunidades por varias circunstancias. “Esperamos que el otro 50% se cumpla en el tiempo estimado”.
Dos aulas de preescolar, dos de básica primaria, un comedor escolar, una cocina, 12 baterías sanitarias (tres de preescolar, siete de media y dos para personas con movilidad reducida) harán parte del bloque nuevo de la institución, el cual se espera sea entregado en el mes de mayo por parte del contratista.
Por su parte, el arquitecto José Arbey Soto Giraldo, en representación del secretario de Educación Henry Gómez Tabares y del alcalde Óscar Castellanos Tabares, indicó que si bien la obra está retrasada, está activa y eso genera la expectativa de que se termine. “Es bueno que la constructora socialice con los interesados el estado y las explicaciones pertinentes”, dijo el arquitecto.
“Lamentamos el contexto total de las obras, es evidente que está retrasada y que ni siquiera llega al 50%, faltando 23 días para que se cumpla el contrato y falta mucha parte de la obra, o sea que es imposible que terminen en ese tiempo. Y que digan que van a estar lista en abril, eso no lo acepto, es evidente que físicamente no es posible”, analizó el arquitecto Soto.
Las demás obras en otras instituciones educativas tienen retrasos similares o peores, según dijeron voceros del sindicato de maestros y padres de familia. Sobre ellas, la constructora, ni el Ministerio de Educación presentaron balances de su estado.
El sindicato de maestros del Quindío ha denunciado el estado lamentable de estas obras, no solo la del colegio Nacional, sino las demás que se propusieron para realizar la denominada jornada única, y que deberían de estar terminadas o a punto de serlo, y no ha sido así. El Suteq manifestó que estas obras pueden ser un elefante blanco del sistema educativo público de Armenia.
En el 2015, el municipio de Armenia se postulópara recibir recursos del Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa FFIE y se firmó el acuerdo marco 1052 entre el Ministerio de Educación Nacional y la alcaldía de Armenia siendo prorrogado el convenio en el 2018 por el entonces secretario de educación Luis Antonio CobaledaGaray, hasta el 31 de diciembre de 2020. El objetivo era construir 164 aulas, 8 comedores – cocina, 7 laboratorios, 8 aulas de tecnología, 8 aulas polivalentes, 3 aulas múltiples, 6 zonas recreativas, 6 zonas administrativas, 289 baterías sanitarias y 5 bibliotecas en 10 instituciones educativas del municipio por un costo cercano a los $50.000millones de pesos, obras que hasta el momento no se han cumplido y algunas se encuentran abandonadas, según ha dicho el Suteq.
Padres de familia, estudiantes, profesores y comunidad en general anunciaron nuevos plantones para que el FFIE y el ministerio de Educación cumplan con las obras.