El famoso mono aullador (Alouatta seniculus), que hace presencia en la zona protegida de Barbas Bremen en Filandia, estaría siendo desplazado o extinguiéndose de manera local por la fragmentación de los bosques en esta área del departamento del Quindío. La noticia fue difundida ayer por la Corporación Autónoma Regional del Quindío, tras presentar los resultados preliminares sobre un monitoreo sobre los peligros que tiene esta especie, como la llamada pava caucana (Penelope perspicax).
“Entre los resultados preliminares que arrojaron los monitoreos sobre estas dos especies se encontró además que la fragmentación de los bosques podría estar desplazando o extinguiendo de manera local la presencia del mono aullador en zonas en las que se hallaban anteriormente, debido a la cercanía con actividades humanas o productivas y pérdida de hábitat”, dice el informe oficial.
En el marco del Sistema Regional de Áreas Protegidas del Eje Cafetero, Sirap – EC, se estableció un convenio entre la Corporación Autónoma Regional de Risaralda, que ejerce la secretaría técnica y la organización Wildlife Conservation Society en Colombia, para la realización de monitoreos participativos en los cinco departamentos que componen el Sirap – EC. Estos monitoreos se han desarrollado entre el 2018 y 2020 con el fin de conocer el estado de ocupación de la pava caucana (Penelope perspicax) y el mono aullador (Alouatta seniculus), su presencia o ausencia en el territorio y las presiones que podrían afectar su estancia.
En el caso del Quindío, finalizando el 2020, estos monitoreos fueron realizados en el sector de la vereda Membrillal de Circasia y la vereda El Vergel de Filandia, inmersos en el Distrito de Conservación de Suelos Barbas Bremen. Los investigadores fueron miembros de la comunidad con incidencia en estas zonas y seleccionados por la CRQ para que se vincularan en este proceso de investigación participativa en el cual fueron contratados, capacitados y dotados con las herramientas para que por un tiempo determinado hicieran un análisis visual y auditivo de los individuos de la fauna.
En la socialización de los resultados que tuvo lugar la mañana de este miércoles 20 de enero también se concluyó que hay una alta probabilidad de ocupación de la pava caucana en las zonas investigadas a diferencia del mono aullador que, en las localidades estudiadas, no presentó ningún registro debido a que su requerimiento de hábitat es mayor con más de 80 hectáreas de bosque. En Colombia solo hay cuatro localidades con presencia de pava caucana y una de ellas es el Distrito de Conservación de Suelos Barbas Bremen.
“¿Por qué estas especies? Son especies focales para la región y el departamento, además de estar amenazadas. La pava caucana es endémica de Colombia y se encuentra en peligro de extinción. (…) Estos resultados identifican las necesidades del establecimiento de corredores biológicos y la gestión de áreas protegidas y otras estrategias de conservación públicas y privadas que garanticen conectividad y aumento en las coberturas boscosas y por ende hábitat para estas y otras especies”, señaló Carolina Valencia Zapata, profesional universitaria de la Subdirección de Gestión Ambiental de la CRQ.