Por: Émerson Castaño
“Estuve en estado de gestación durante 22 semanas y media; El día sábado 23 de octubre de 2021, a las 5 de la tarde aproximadamente, acudí a las instalaciones del E.S.E HOSPITAL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS de Quimbaya, debido a que sentía fuertes dolores, tenía flujo y me sentía muy enferma; Debido a razones que pretendo aclarar, el día 24 de octubre de 2021 mi bebé nació sin vida…”.
En el escrito de tutela, Kelly Dahiana López, al juez le dice que el centro de salud le viene negando respuesta de fondo a un derecho de petición. Ella había solicitado lo siguiente: “Explicarme la razón por la cual el médico del HOSPITAL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS no me remitió inmediatamente a la ciudad de Armenia”. Y agrega: “Requerir al médico tratante para que explique las razones pedidas en el numeral anterior.”
El 8 de abril del presente año, el juez de tutela ordena: “ordenar al HOSPITAL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, a través de su representa legal, o quien haga sus veces, que en un término de cuarenta y ocho (48) horas siguientes, contadas a partir de la notificación de esta providencia, de respuesta oportuna, de fondo y clara, respecto a la petición presentada por el tutelante ante la identidad accionada el día dieciocho (18) de febrero de dos mil veintidós (2022)”.–Ver fallo de Tutela–.
A pesar de lo anterior, el gerente del hospital desobedeció lo ordenado por el juez de la república.
El día 12 de abril, Kelly Dahiana López, interpone un desacato, expresándole al juez lo siguiente: “El día 11 de abril de 2022, me llegó una respuesta por parte del HOSPITAL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS DE QUIMBAYA, pero la respuesta es totalmente ajena a la petición presentada”. Según la respuesta del hospital, este columnista interpreta que se intenta ocultar la práctica médica que llevo a la pérdida del hijo. De nuevo entonces el 27 de abril recurre al juez para enterarlo que el hospital sigue evadiendo respuestas de fondo. Le solicita al juez: “Con base en los hechos narrados me permito solicitarle al despacho que en los términos de ley, le ordene al HOSPITAL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS DE QUIMBAYA el cumplimiento del fallo, o en su defecto se imponga la multa y la orden de arresto que están prescritos en la norma”.
En busca de que alguien le responda a ella por la negligencia médica, le solicita al gerente la póliza de seguro de responsabilidad civil del centro de salud, y hasta el momento de publicar esta columna, no hay respuesta. Sin embargo, nada pasará, ni habrá cárcel para el gerente. Con este tipo, o esperpento de gerente, en vez de investigarlo los entes de control, lo protegen. Y lo protege la gobernación del Quindío. Además, el testimonio de Kelly Dahiana López, es la evidencia irrefutable de la crisis de la salud en el Quindío.
Este columnista seguirá con detalle el caso anterior. Como también, le enviará un derecho de petición a la secretaria de salud del departamento con el fin de que me diga si ella–Yenny Alexandra Trujillo Álzate, tiene acciones en la Clínica la Sagrada Familia.