Belalcázar P.C.C.C.

4 julio 2022 4:02 pm

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Por Fernando Jaramillo Botero

Llamado El Balcón del Paisaje hace homenaje a Sebastián de Belalcázar considerado más que un colonizador español un verdadero comerciante al introducir negocios como la cría de ganado y el negocio de cerdos y bestias, además de fundar a Quito, Guayaquil, Popayán y Cali en lugares estratégicos que luego se convertirían en grandes y pobladas urbes; los indígenas lo acusan de genocida y asesino despiadado en razón a varios ataques donde murieron gran cantidad de indígenas en varias tribus y poblados centroamericanos. Fundado en noviembre de 1888 por Pedro Orozco y varios colonos más en la segunda etapa de la colonización antioqueña que se hace cultivando maíz y café, engordando cerdos y huyendo de las guerras civiles que desangraron al país en el siglo XIX, hace parte de esos pueblos pequeños enclavados en las montañas y donde parece que el tiempo no pasa, su población no envejece y los pobladores viven despreocupadamente el día a día.

El municipio es famoso por su Cristo Rey ubicado en lo alto del casco urbano y por el parque ecoambiental La Estampilla donde se destaca un pueblo indígena descendiente de los Ansermas con su cementerio tradicional, se considera que los actuales indígenas Embera Chamí son los descendientes más cercanos de los Quimbayas; el monumento a Jesucristo fue erigido para pedir por la paz nacional después de la violencia política generada por la muerte de Jorge Eliecer Gaitán en Bogotá en abril de 1948, violencia que generó las guerrillas liberales del llano lideradas por el araucano Guadalupe Salcedo y que por extensión del conflicto llega hasta nuestros días; el Cristo es uno de los más altos del mundo con cerca de 50 metros de altura y quienes logran subir por escalinatas internas hasta su cabeza disfrutaran de un paisaje excepcional enmarcado por el rio Cauca y el rio Risaralda, además de apreciar gran cantidad de municipios del Paisaje Cultural Cafetero; en los valles que forman estos ríos hay gran cantidad de alojamientos turísticos, zonas deportivas y recreativas enmarcadas por las montañas donde también se divisa el Parque Natural Tatamá que igualmente hace parte de los Patrimonios Mundiales de la Humanidad declarado por Unesco. Entre sus festividades más significativas están la Semana Santa, las fiestas a la Virgen del Carmen, las fiestas aniversarias y de la juventud y las fiestas al paisaje belalcazarita.

Las fincas cafeteras con recorridos para finquiar se imponen actualmente cuando los turistas nacionales han volteado las miradas a los atractivos de su propio país ante las dificultades de viajar al exterior en razón a la pandemia que mató más de seis millones de personas en todo el mundo y que aún no termina; cultivos de café, plátano, caña, maíz y otros más son admirados por muchos niños y jóvenes que por su vivir citadino no conocen una mata de maiz o una mata de frijol, mucho menos un arbusto de lentejas o el árbol de la canela y ni que decir de la vainilla o la miel maple que se extrae de los árboles de Arce, recorridos tan sencillos para el campesino parecen llenos de magia para quienes nunca han visto florecer la pitahaya o ver crecer la guadua hasta 20 centímetros en un solo día.

La ganadería es otra de las labores del campesino regional, en las fincas no falta la vaca lechera o algunos terneros de ceba y levante para ayudar a la economía de la finca, “el ojo del amo engorda el ganado” decían los abuelos, y esto lo practican los campesinos diversificando sus labores para mejorar los ingresos porque cuando el precio de un producto baja, habrá otro que suba y ahí se equilibran las cargas como dicen los arrieros con sus recuas de mulas y bueyes. Algunas cabras y ovejas también se crían en los terrenos escarpados de las montañas aprovechando la rusticidad de estos animales que aportan leche, carne y lana para complementar la economía tradicional.

Julio de 2022

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