De aerolíneas y aeropuertos

17 julio 2022 7:22 pm

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Por Iván Restrepo

“Vini, Vidi, No Vici” pareciera ser la consigna para aplicar a las aerolíneas que han hecho ingentes esfuerzos para conquistar esta, la tierra del Quindío: Satena, Easyfly (no pudo con Bogotá), una pequeña aerolínea de Aruba cuyo nombre no recuerdo (así fue de breve su actuación), Air Panamá y alguna otra por ahí. Es una lástima que esto suceda, nuestro destino siempre se regocija cuando nos anuncian una nueva aerolínea, y es por eso que ahora, nuevamente ilusionados, esperamos que Wingo pegue con sus anhelados vuelos a Bogotá y después ojalá a otros destinos.

Tengo que destacar y ponderar los esfuerzos de los sectores locales, comenzando por nuestro Gobernador y sus asistentes, quienes en contadas ocasiones se la han jugado con todas las aerolíneas, para al final no pasar de la frustración al ver que de nada sirvió. Ojalá que esto no los desmotive para seguir en la búsqueda de los anhelados vuelos nacionales e internacionales que se puedan ajustar a las características de nuestro rimbombantemente llamado “Aeropuerto Internacional El Edén”.

Tengamos siempre presente, no obstante, los deseos y esfuerzos de todos por acercar aerolíneas que nos lleven y nos traigan que es el mercado de la oferta/demanda la que al final determina si un vuelo cualquiera cumple con todos los requisitos para perpetuarse en el tiempo.

He tenido la oportunidad de conversar con expertos en temas de aviación civil y sí, es cierto que el costo de abastecerse de combustible en Armenia resulta bastante oneroso para algunas aerolíneas al no tener un volumen adecuado de vuelos hacia y desde nuestro aeropuerto; contra esta premisa veo que es poco lo que se puede hacer, a no ser que exista alguna entidad que esté dispuesta a correr con este costo de la diferencia contra el costo ideal de llenar un avión.

Aprovecho la ocasión que toco este tema de vuelos para una vez más insistir en las grandes ventajas que tenemos regionalmente al tener un aeropuerto como el de Matecaña, –a tan solo 40 minutos de nuestra capital y a una hora y pico de Manizales–, con un número muy superior de vuelos, proporcional a su población, muy por encima de las de Armenia y Manizales. La población que se sirve del terminal aéreo de la Perla del Otún sobrepasa los 4 millones de habitantes, por encima de Cali, Medellín y Barranquilla, por esa ventaja que heredamos de haber sido otrora el Gran Caldas, con un sinnúmero de ventajas por esto.

Tengo que aclarar que el aeropuerto de Matecaña no es el más idóneo dado que por su ubicación no es factible pensar en una adecuación para poder recibir los tipos de aviones que requiere la aviación mundial. La ubicación ideal para un aeropuerto regional del futuro no es otra que Cartago, así muchos coterráneos míos, esos que suelen dejar estacionado su carro al frente del atrio de la iglesia para cumplir con su precepto de la misa dominical, piensen que estoy errado. A este propósito los invito a comparar distancias de ciudades del resto del mundo y sus respectivos aeropuertos: mi análisis me indica una distancia promedio de 90 kilómetros mientras que la distancia de Manizales a Cartago es de tan solo 81 kilómetros por carretera con un tiempo promedio de desplazamiento de 1 h 42 minutos.

Somos pocos los países del mundo que todavía recurren al taxi para desplazamientos aeropuerto-ciudades ya que lo común es usar el transporte colectivo en donde lo hay. No recuerdo haber utilizado taxi en los últimos 30 años de haber trasegado por el mundo ya que Bus y Metro es lo usual. Va siendo pues hora de pensar en medios masivos, esperando que nuestras carreteras intermunicipales puedan ser de las mejores de Colombia.

Para terminar, y ligado a este tema, no estoy de acuerdo con el aeropuerto de Manizales. Es un capricho de unos cuantos políticos cuyo costo rebasa ya todas las predicciones y con una relación costo/beneficio que no se ve viable por lado alguno. A propósito de Aerocafé, recuerdo una tétrica anécdota que escuché por ahí sobre el tema del cambio de nombre de Aeropuerto de Palestina al de Aerocafé. Dicen las leyendas que el nombre anterior, el de “Palestina”, generó temores al pensar que de pronto algún día, con este tema de los bombardeos a regiones en conflicto bélico, alguien en algún país con órdenes de bombardear a Palestina se podría equivocar y ¡Boom!  borrar del mapa a Palestina, Caldas.

Hasta la próxima,

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