Jhon Fáber Quintero Olaya
La semana que termina estuvo marcada por las noticias judiciales y políticas de La Argentina y Perú. Cristina Fernández de Kirchner, Vicepresidenta del país del cono sur, fue declarada culpable por diferentes delitos contra la administración pública. Sus defensores, incluyendo al Presidente, rechazaron la determinación de los jueces y la tildaron como una persecución política. ¿En caso de ser absuelta cuál hubiera sido la interpretación?
Por otro lado, el Presidente de Perú Pedro José Castillo Terrones, un docente que llegó a la jefatura de Estado por su condición de docente y hombre humilde, decidió declarar un Estado de Excepción y correlativamente fue destituido por el Congreso de esa nación. La institucionalidad reaccionó rápidamente ante esta situación extrema privó de la libertad al profesor por la comisión del delito político de rebelión. El otrora mandatario tramitaba un proceso de asilo en México, el cual curiosamente, se vio truncada por su captura exprés.
En Colombia, el Presidente Petro, anunció durante la semana en curso que va a designar a diferentes ciudadanos capturados y procesados en las protestas como “Gestores de paz”. De manera pública, es decir, sin ningún consenso con la Fiscalía y la Rama Judicial el primer Magistrado del Estado aseveró que se trataba de jóvenes que fueron perseguidos por las instituciones. Olvidó el ex Senador que en cada proceso se cuenta con jueces de garantías y de conocimiento que son los que toman las decisiones. La independencia de poderes es un pilar del Estado de derecho.
Estos 3 acontecimientos nos permiten recordar al jurista alemán Gustav Radbruch que cuando reflexionaba sobre el positivismo expresaba que el valor de la Ley no estaba sólo condicionado al procedimiento legislativo y a la autoridad que expide la norma jurídica. Planteaba el doctrinante que “toda ley positiva lleva a un valor en sí misma, independientemente de su contenido”, con lo que buscaba diferenciar el concepto de deber y validez del que engloba la seguridad jurídica. No toda norma es jurídica, por cuanto es relevante el estudio de su procedimiento como de su contenido.
Aterrizando este planteamiento a lo acaecido en el segundo fin de semana decembrino, podemos decir que cuando el derecho se utiliza como un instrumento exclusivo de poder se aparta de sus fines esenciales. No está bien la descalificación judicial por cuenta de una providencia que cuenta con recursos procesales para su contradicción. Los eventuales errores o sesgos de los magistrados de instancia pueden ser expuestos en los diferentes espacios que permite la legislación argentina. Luego, trascender el filtro de las partes y llevar los cuestionamientos al colectivo puede distorsionar y generar presiones indebidas sobre el paradigmático caso.
Tampoco es justificable que se utilice el Estado de Excepción como mecanismo de retención del poder. La Constitución y la Ley encuentran en el Presidente su principal promotor y garante, por lo que anunciar, momentos antes de la separación del cargo, decisiones tan lesivas para una democracia sin justificación alguna es claramente un exceso de poder. El rechazo generalizado a esta terrible práctica generó una reacción contundente.
Sin embargo, la posibilidad del Parlamento de separar de funciones al Presidente, siendo electo por voto popular, por razones de orden político debe generar también una profunda valoración ciudadana. En Perú no es el primer mandatario que termina anticipadamente por su periodo por diferencias con el legislativo. La inestabilidad que ello produce en diferentes ámbitos se siente desde la Patagonia hasta Alaska.
Por último, en Colombia el Presidente debe recordar que la colaboración armónica es la base y fundamento del interés general representado en el Estado de Derecho. No está bien que vaticine como un emperador que ciertas personas pasarán navidad en sus casas, ignorando que cada proceso es un universo y que son los jueces los llamados a escuchar las peticiones del gobierno y no sus órdenes. La navidad avanza y el frío se hace caluroso con este teatro de circunstancias en América Latina.