José Gustavo Hernández Castaño
Hablando de pactos, el Pacto Histórico (PH) necesita de pactos a su interior.
En las elecciones del 2.023, si quiere profundizar los cambios y ampliarlos territorialmente, debe pactar acuerdos entre todos sus partidos, entre todos sus líderes, en las regiones, para evitar con su atomización una posible autodestrucción. No existen luchas más dañinas que las viscerales que se dan internamente. Los excesos egocentristas están actuando y de qué manera como aves carroñeras ávidas de la presa.
Hay que aprender de la historia, la que con múltiples ejemplos nos da a cada rato, la que con sus ejemplos nos dice que, los enemigos agazapados dentro y fuera del P. Histórico, quieren impedir los avances en cada Departamento, propiciando y estimulando esos egocentrismos divisionistas.
Las mafias de la política, las mafias del contratismo, las mafias corruptas del establecimiento, entronizadas y usufructuarias del poder regional, son observadoras y estimuladoras de las contradicciones internas, para que con su división les dejen el terreno abonado a sus propósitos y a sus engañifas.
El buitre mayor, la corruptela mafiosa del establecimiento, en el Departamento, está al asecho. En esa trapisonda pueden caer unos y otros (me refiero a los sectores del PH) estimulados por una división enfermiza.
Es perceptible, hoy, cómo desde el edificio del Centro Administrativo Municipal (CAM) se viene estimulando el jalonamiento de sectores del Pacto Histórico, para ellos mantenerse. Es perceptible también que, desde el edificio de la Gobernación, se hace lo propio, atrayendo a otros sectores de la parte enfrentada, para lo mismo, para mantenerse. Y una tercera vertiente, la desprendida de ambos sectores del establecimiento, estimulada por los mismos, la que dice estar de este lado, pretende embaucar al resto.
Hay que tener talante, hay que tener identidad de mínimos ideológicos, queriendo disputar esos espacios de poder y no ser peones de brega de los corifeos del Statu Quo y alzafuelles del actual corrupto poder en lo local. Los ingenuos, los débiles en política, no tienen futuro.
Respetando el liderazgo de cada quien, al interior del PH, se debe pactar una dirección colectiva que sea reconocida como tal, y con dicha autoridad, pueda pactar alianzas con otros actores políticos del Frente Amplio, o con Partidos del Acuerdo Nacional que no estén comprometidos con hechos de corrupción, buscando candidatos únicos por consenso o por consulta, con miras a dar sentido de orientación política y producir resultados de cambio, en lo electoral.
En el orden Nacional debe haber un completo mapa político de los diversos actores políticos, y sus múltiples tendencias; una completa cartografía política, por Departamento y por Municipio. El Quindío no puede ser la excepción.
En el Quindío, en dos procesos electorales los ciudadanos han hablado y de qué manera, pero, no han sido entendidos, ni interpretados adecuadamente en su comportamiento electoral por los nuevos liderazgos.
En 2.019, fueron 183.725 votos de fastidio y rechazo a la corrupta politiquería. 49.192 votos en blanco; 27.436 tarjetas no marcadas; 11.761 votos nulos; 95.336 votos por movimientos políticos alternativos, tales como: QUINDÍO DIFERENTE, ASI, COLOMBIA RENACIENTE, AICO, MAIS, ALIANZA VERDE, el PRE y los siguientes grupos significativos de ciudadanos: Comprometidos con la Esperanza, Nueva Ciudadanía, Creemos en Calarcá, Unámonos por Circasia, SUMA sociedad unida en Pijao, Génova nos mueve, Conscientes Salento. (1)
En el 2.022, en las elecciones de Cámara de Representantes, los partidos alternativos, aumentaron de manera ostensible su votación. El polo de 3.462 votos en 2.014, pasó a 6.749 como Centro Esperanza. La Alianza verde de 2.947 en 2.018, pasó a 10.831, en 2.022. El Nuevo Liberalismo, después de muchos años de no estar en la escena política obtiene 5.078 votos. El Pacto Histórico, la revelación en estas elecciones, obtiene 28.245 votos.
En la elección presidencial, fue el escenario propicio para identificar el voto por el cambio. El deseo de cambio y el castigo a las maquinarias fue concluyente, categórico: 113.537 votos por Petro (segunda vuelta) y 80.780 por Rodolfo de los Rodolfistas-Rodolfistas (primera vuelta), es decir, en total, 194.317 votos deseosos de producir cambios.
Por el contrario, los partidos que han ostentado el poder en los últimos veinte años, descendieron de manera considerable en sus guarismos electorales, en las elecciones de Cámara, veamos:
El partido liberal en el 2.018 obtuvo 62.885 votos y en el 2.022 obtuvo 38.133 votos, disminuyendo en 24.752 votos.
Cambio Radical en 2.014 obtuvo 59.546 votos; 2.018 (39.660 votos); 2.022 (33.907 votos), con caída en barrena, disminuyendo en 25.639 votos.
Centro Democrático, en 2.018 (39.446 votos), en 2.022 (20.586 votos), descendió 19.074 votos.
El MIRA, en 2.018 (24.468 votos), 2.022 en coalición con otros movimientos (18.165 votos).
El partido de la U, en 2014 (25.941 votos); 2.018 (3.118 votos); y en 2.022 (12.898 votos).
Un análisis puntual, detallado, objetivo, nos dará las razones explicativas del comportamiento electoral de los Quindianos.
Las condiciones están dadas, la coyuntura es propicia, hay que estimular la unidad en medio de la diversidad y la diferencia; hay que tener vocación de poder y ganas de ganar.
Las elecciones de las autoridades locales en el 2.023, será el momento propicio para elegir nuevos Alcaldes/as y nuevo Gobernador/a, que le aporten al cambio.
(*) Magister en Ciencias Políticas
E-mail: [email protected]
|
|
https://www.registraduria.gov.co/ |
|