Por: José Gustavo Hernández Castaño (*)
Como lo expresé en columna anterior, me ocuparía en columnas posteriores de otros asuntos relacionados con el corrupto contratismo.
En esta oportunidad voy a publicar algunos datos relacionados con el municipio de Armenia. También, he dirigido a la alcaldía de Armenia y a todas sus dependencias, derechos de petición, solicitando información sobre los contratos realizados durante los años 2020, 2021 y 2022, para hacer el análisis pertinente, informar a la ciudadanía y pedir a los órganos de control cumplan con su papel de vigilancia de los mismos.
Se trata de cuantiosos recursos del erario público que se hace necesario develar y sobre los cuales se debe ejercer control ciudadano.
Veamos de manera sucinta, los contratos subidos y rendidos en la plataforma SIA OBSERVA ciudadanía, por algunas dependencias del municipio de Armenia.
(https://siaobserva.auditoria.gov.co/guess/informeA_guess.aspx#dialogMensaje)
En Armenia en 2020 fueron 4.595 contratos por un valor de $36.406.826.498; en 2021 fueron 4.231 contratos por un valor de $116.787.418.455 y en 2022 fueron 4.682 contratos por un valor de $204.488.484.700. como puede observarse hay un gran salto incremental en los recursos destinados a contratación que por sí llaman la atención, simplemente como dato, que debe suscitar análisis e investigación. Entre el 2020 y el 2021, hubo un incremento del 321%; y entre el 2020 y el 2022, un incremento del 562%.
En el Concejo Municipal, en 2020, se produjeron 180 contratos por un valor de $658.860.514; en 2021 fueron 227 contratos por un valor de $887.011.750; en 2022 fueron 215 contratos por un valor de $1.014.240.885. Entre el 2020 y el 2021, hubo un incremento del 135%; y entre el 2020 y el 2022, un incremento del 154%.
En Corpocultura, en 2020, se produjeron 194 contratos por un valor de $3.316.619.200; en 2021 fueron 129 contratos por un valor de $2.641.353.388; en 2022 fueron 112 contratos por un valor de $1.492.387.381.
En la EDUA, en 2020, se produjeron 64 contratos por un valor de $258.062.175; en 2021 fueron 78 contratos por un valor de $390.229.979; en 2022 fueron 57 contratos por un valor de $782.198.126. Entre el 2020 y el 2021, hubo un incremento del 151%; y entre el 2020 y el 2022, un incremento del 303%.
En EPA, en 2020, se produjeron 408 contratos por un valor de $39.881.082.868; en 2021 fueron 548 contratos por un valor de $58.457.596.503; en 2022 fueron 633 contratos por un valor de $58.256.157.553. Entre el 2020 y el 2021, hubo un incremento del 146%; y entre el 2020 y el 2022, un incremento del 146%.
En la Contraloría Municipal, en 2020, se produjeron 55 contratos por un valor de $333. 566.010; en 2021 fueron 59 contratos por un valor de $359.428.900; en 2022 fueron 39 contratos por un valor de $294.028.758.
En la Personería, en 2020, se produjeron 118 contratos por un valor de $567.513.916; en 2021 fueron 126 contratos por un valor de $452.754.397; en 2022 fueron 83 contratos por un valor de $663.331.167.
ENTIDAD |
AÑO |
No CONTRATOS |
VALOR |
|
2.020 |
4.595 |
$36.406.826.498 |
ARMENIA |
2.021 |
4.231 |
$116.787.418.455 |
|
2.022 |
4.682 |
$204.488.484.700 |
|
2.020 |
180 |
$658.860.514 |
CONCEJO |
2.021 |
227 |
$887.011.750 |
|
2.022 |
215 |
$1.014.240.885 |
|
2.020 |
194 |
$3.316.619.200 |
CORPOCULTURA |
2.021 |
129 |
$2.641.353.388 |
|
2.022 |
112 |
$1.492.387.381 |
|
2.020 |
64 |
$258.062.175 |
EDUA |
2.021 |
78 |
$390.229.979 |
|
2.022 |
57 |
$782.198.126 |
|
2.020 |
408 |
$39.881.082.868 |
EPA |
2.021 |
548 |
$58.457.596.503 |
|
2.022 |
633 |
$58.256.157.553 |
|
2.020 |
55 |
$333. 566.010 |
CONTRALORIA |
2.021 |
59 |
$359.428.900 |
|
2.022 |
39 |
$294.028.758 |
|
2.020 |
118 |
$567.513.916 |
PERSONERIA |
2.021 |
126 |
$452.754.397 |
|
2.022 |
83 |
$663.331.167 |
Es de conocimiento público que, el Concejo Municipal aprobó para 2023, un presupuesto de $652 mil millones. También lo es, que los ciudadanos de Armenia pagan, cumplidamente, los impuestos (predial, industria y comercio, y otros); se sabe que, vienen pagando el impuesto de valorización, directamente o por cobro coactivo; se sabe que, el municipio recibió de las aseguradoras cerca de 25 mil millones, correspondientes a las pólizas por el defalco de valorización. Y con todo ello las obras que se ven son muy pocas, ni siquiera las de valorización. Y para completar, el barril sin fondo en el que han convertido (las finanzas del municipio), lo endeudaron por $60 mil millones, primero, y $20 mil millones, después. No alcanza ningún presupuesto para los saqueadores. Ahora enfilan baterías para el culmen del saqueo en las elecciones de 2023.
Dónde está la platica, la que corresponde a los ciudadanos como valor público. Como decían los abuelos en su sabiduría: ”esa platica se perdió”, y, si no se ha perdido todavía, tiende a perderse. Tiende a transitar el oscuro camino que va del erario público a los bolsillos de la corrupta politiquería que, hoy, tiene nombres concretos en la ciudad.
Están feriando todo, para robarse todo. Están entregando o alquilando a destajo bienes del municipio hasta guaduales y parques de la ciudad.
No hay que olvidar que existen zonas de conservación ambiental y áreas de cesión que son bienes de propiedad y al cuidado del municipio.
El espacio público es un elemento fundamental en cada ciudad y constitutivo de su ordenamiento territorial, por lo que connota. Los ciudadanos tenemos derecho al disfrute de espacio público, parques, plazas, por su valor histórico y patrimonial. Sin embargo, al soberano medioeval y al alcalde nominal, en un momento de arrebato, en sus after party, se les ocurrió que podían modificar el POT y cambiar los bienes públicos en propiedad particular.
Dos botones de muestra: un guadual frente al barrio cooperativo; bien público, como reserva natural, entregado a un particular. El parque de la Cruz Roja, lo destruyeron y corrieron el cerramiento, construyeron parqueaderos y lo volvieron zona rosa para alquilarlo a un particular. Como estos dos casos, hay muchos; están feriando toda la ciudad. Las áreas de cesión obligatoria que tienen el carácter de utilidad pública se las están robando.
Vuelvo apoyarme en la investigación realizada por la Misión de Observación Electoral, MOE, en el año 2018, y publicada bajo el título “Así se roban a Colombia”, para decir que la corrupción no cae del cielo, tiene nombres concretos, instituciones concretas, seres de carne y hueso, concretos. En el Quindío y Armenia, tienen nombres concretos.
Como representación gráfica de las conductas de corrupción encontradas en la investigación se habla de 60 modalidades de corrupción agrupadas en 9 grandes tipologías.
He escogido solo 12 para preguntar: ¿En cuáles de las siguientes tipologías y modalidades se ubican los gobernantes, del Quindío, y de Armenia?
- Incluir sobrecostos en los contratos públicos.
- Pedir sobornos a cambio de contratos.
- Usar el cargo para beneficiarse a sí mismo, a su familia o a sus amigos.
- contratar a dedo.
- Amañar pliego de condiciones y/o procesos de selección.
- Pagar por un contrato no ejecutado.
- Pagar por un bien o servicio de mala calidad
- Dejar incompleta una obra o cumplir a medias con las obligaciones contractuales.
- Endeudar injustificadamente a una entidad territorial.
- Realizar convenios de cooperación e interadministrativos para evitar hacer licitaciones.
- Prorrogar un contrato a cambio de un soborno.
- Pedir dádivas a cambio del voto en una corporación pública.
“no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista”
o como decían los arrieros: “la cincha algún día se revienta”
o esta otra de los campesinos: “tanto rueda el cántaro hasta que por fin se rompe”
Los órganos de control, la fiscalía, la procuraduría, la contraloría, tienen la palabra.
(*) Magister en Ciencias Políticas
E-mail: [email protected]