Émerson Castaño
Como saben que serán derrotados en las próximas elecciones del 29 de octubre, le ha tocado rápidamente a un miembro de la Casa Jaramillo escribir un artículo en el diario ELTIEMPO explicando por qué razón ciertos “grupos oscuros” con “dineros de dudosa procedencia” influenciará en la voluntad de los quindianos.
El 6 de septiembre (2023) entonces Pablo Jaramillo Arango (hijo del Gobernador del Quindío) escribe un artículo en ELTIEMPO, diciendo en uno de los párrafos, refiriéndose al Quindío, lo siguiente: “…hay un par de candidatos en el departamento que son apoyados por numerosos partidos y tiene dudosas fuentes de financiación. Yo me pregunto ¿Qué le quedaría al Quindío cuando el gobernante tenga que repartir la torta (presupuesto estatal) entre los partidos y sus oscuros financiadores? –ver columna en https://www.eltiempo.com/colombia/otras-ciudades/querian-que-hablara-columna-de-pablo-jaramillo-arango-803064 –.
Se le olvida a Pablo Jaramillo Arango explicar quién financió la campaña a la gobernación de su papá Roberto Jairo Jaramillo. Ahora, en virtud de su pobre memoria, le voy a recordar algo al columnista.
Dese cuenta usted Pablo que su querido padre una vez concluyó la exitosa campaña que lo llevó a ser elegido gobernador del Quindío para cuatro nefastos años, tenía la obligación de reportar gastos de campaña, donaciones, contribuciones y créditos ante el consejo nacional electoral. De hecho, le dijo a dicha entidad que una empresa de transporte le había donado $100.000.000. Y otra empresa de transporte (Transporte cava S.A.S) también le había donado $20.000.000.
En el informe presentando, también hacen referencia de un buen número de particulares que aportaron dineros a la campaña. Sin embargo, Pablo, su papá mintió. Se trató de un informe maquillado para ocultar las cifras verdaderas de gastos de campaña. Además, su inepto progenitor mintió para ocultar los verdaderos donantes. Y se lo voy a demostrar: por ejemplo, Adriana Patricia Cardona la incluyeron en el informe como la donante de $10.000.000.
Adriana Patricia vive en la ciudad de Medellín, pero ella ni lo conoce a usted ni conoce a su papá. Ella nunca hizo esa donación de diez millones de pesos. En el informe contable, utilizaron el nombre de la dama, su dirección y teléfono para legalizar un aporte que ella no realizó. Tanto usted como columnista y Roberto como gobernador, le mienten al Quindío. Se quieren presentar ante la opinión del país como la familia perfecta e incorruptible. Usted y su papá le han causado mucho daño al Quindío. Ustedes representan la peor clase política en la historia administrativo del Quindío.
Su papá como político y administrador es un completo desastre. No intente usted decir en sus columnas que existe “dos candidatos con dudosas fuentes de financiación”, sea más frentero y diga el nombre de los candidatos. En cambio, con lo demostrado arriba, al interior de la campaña de Roberto Jairo gobernador, existió corrupción electoral. Lo bueno de todo esto Pablo, es que ustedes nunca jamás volverán al poder. Y todos los quindianos estamos felices porque le queda muy pocos meses para que Roberto termine lo que ha hecho muy mal.
Les deseo un feliz fin de semana. Chao Roberto!!