Varios destrozos en la sede administrativa del Deportes Quindío causó un grupo de por lo menos 50 personas la noche de ayer lunes.
Los atacantes llegaron en motocicletas y tras lanzar piedras y objetos contra la fachada del inmueble, ubicado en el barrio Coinca en el norte de la ciudad de Armenia, intentaron ingresar al mismo.
La situación generó momentos de angustia y pánico en los habitantes de la zona, que en medio de la zozobra dieron aviso a las autoridades.
Además de los daños han causado preocupación unos mensajes con amenazas de muerte contra el director técnico Óscar Héctor Quintabani y algunos jugadores.
Este hecho se suma al registrado la semana pasada cuando el bus del equipo también fue atacado con piedras.
Estos casos tienen en alerta a las autoridades e incluso como medida de seguridad el partido que se jugará este martes en el estadio Centenario entre los cafeteros y Llaneros se hará a puerta cerrada.
Se espera que hoy se entregue un reporte oficial de lo ocurrido y se anuncien las medidas a seguir.