• MIÉRCOLES,  24 ABRIL DE 2024

Colombia  |  21 abril de 2023  |  12:00 AM |  Escrito por: Administrador web

Voluntariado Vicentino de la Caridad cumple 100 años de apoyo a los pobres de Armenia

0 Comentarios

Imagen noticia

Las damas de la caridad han estado durante 4 siglos por todo el mundo, ayudando a los pobres, los enfermos y los necesitados. Desde 1617 existe esta asociación, creada por el propio San Vicente de Paúl e impulsada por Santa Luisa de Marillac, en Lyons, Francia.

En Armenia, un grupo de señoras, encabezadas por Esther Arango de Vieira, Anita Uribe de Vélez y Sor Luisa Villegas, animadas por el sacerdote Alfonso de los Ríos Cook, crearon el 19 de abril de 1923 las Damas de la Caridad de San Vicente de Paul de Armenia, que luego tomaron el nombre de Voluntariado Vicentino de la Caridad, con el propósito de ofrecer un paliativo a los sufrimientos de cientos de familias pobres y a los enfermos que carecían de recursos para su subsistencia.

Esther Arango de Vieira, primera presidenta, 1923; Amparo Mejía de Tirado, presidenta en la celebración de los 50 años, 1973; Lesbia álzate de Gómez, presidenta actual, 2023.

De acuerdo con el relato firmado por la periodista Beatriz Alzate García en 1973, en la celebración de los 50 años de la entidad, fueron 30 mujeres las que se reunieron y fundaron el voluntariado, que inició con la puesta en marcha de la Casa del Pobre.

En este año de 2023, las Damas de la Caridad o el Voluntariado Vicentino de la Caridad en Armenia cumple 100 años. No ha sido nada fácil mantenerse vigente, pues su sostenibilidad ha dependido siempre de la mano caritativa de decenas de familias de la capital quindiana que con devoción y siguiendo los preceptos cristianos han hecho donaciones para las obras sociales que han liderado con amor estas mujeres, la mayoría de ellas ya fallecidas. Rendimos homenaje a ellas, como adalides del amor al prójimo, sin mirar su condición social y económica.

El Banquete de la Caridad

Banquete de la Caridad, que se ha realizado por más de 75 años.

Una de las actividades más importantes para financiar las obras que realizaban las Damas de la Caridad fue el Banquete de la Caridad, oficiado por el Obispo de la Diócesis de Armenia.

Todas las señoras se ponían en la tarea de vender las tarjetas. Unas tenían más ‘audacia’ para esta tarea que otras. En todo caso, la idea era vender entre 200 y 250 tarjetas, con lo que se recogía el dinero para luego trasladarlo a obras para las familias pobres.

En el banquete se servían tres alimentos: un caldo de pollo, un pan y una copa de vino. Las que lo servían eran las propias damas o sus hijas, y, a veces, personas destacadas, como las candidatas a los reinados regionales.

El caldo se hacía en la casa de una de las damas, con pollos regalados por uno o dos avicultores del Quindío. El pan lo obsequiaban, igualmente, varios panaderos de la región. El vino era una donación de señores pudientes de la ciudad.

El banquete se hacía en el salón Esmeralda del Club América y en algunas oportunidades en el salón principal del colegio de las Betlemitas.

Hace cerca de cinco años que el banquete no se ha podido realizar, entre otras cosas, por la pandemia del Covid-19, que suspendió todas las reuniones y trabajos de congregación.

Volver al Banquete de la Caridad, uno de los propósitos de la junta directiva actual del Voluntariados Vicentino de la Caridad de Armenia.

UN BONITO RECUERDO: Casa de obras sociales La Milagrosa

Después de la Casa del Pobre, las Damas de la Caridad de Armenia fundaron la Casa de obras sociales La Milagrosa, en un terreno donado por don José Jaramillo Vallejo en el barrio Granada, carrera 23 con calle 10 esquina. Allí funcionó la sede de las Damas de la Caridad, desde donde se hicieron maravillosas obras sociales.

En esta edificación, construida en los años sesenta, funcionó la Casa de obras sociales La Milagrosa, desde donde se desplegó una extraordinaria acción de ayuda a los pobres de Armenia. La edificación ya no existe, y, en cambio, hay una nueva sede en el mismo sitio, donde se sigue atendiendo a los más necesitados de la ciudad.

Mencionamos algunos de esos servicios que se prestaron con amor y devoción por parte de las Damas de la Caridad:

-Escuela Primaria

-Alfabetización de niños

-Capacitación de señoras en modistería, artesanías, tejidos, culinaria, etc.

-La Gota de Leche. Las Damas repartían 100 teteros diarios a igual número de bebés.

Restaurante escolar: Más de 150 niños acudían a este almuerzo diario.

Minimercado: Cerca de 1.000 personas recibían semanalmente alimentos básicos para preparar en casa: leche, harinas y aceite.

Costurero prenatal: a las madres gestantes se les enseñaba a confeccionar las ropas para su bebé.

Costurero de los viernes. Se conseguía ropa en buen estado que ya no se usa, se arreglaba y se entregaba a los necesitados.

Puesto de salud y farmacia. Este era un servicio primario de atención en salud y odontología que se ofrecía gratuitamente, con apoyo de médicos y odontólogos de la región. Igualmente, se ofrecían los medicamentos a través de la farmacia del voluntariado.

Visitas domiciliarias. Un grupo de damas de la caridad visitaba a las familias más necesitadas, acompañadas de trabajadoras sociales y psicólogos, para asesorar a los hogares en diferentes aspectos.

Bolsa de trabajo. Esta labor estaba orientada en dos sentidos: capacitación y busca de empleo para aquellos que aprendían un oficio.

CERAL, una obra inolvidable

Con el liderazgo de doña Ofelia Botero de Urrea se creó en los años ochenta el Centro de Rehabilitación para la Audición y el Lenguaje -CERAL-, que prestó una gran ayuda a las personas con discapacidad auditiva y del habla. La institución desapareció en la primera década del siglo XXI por falta de apoyo.

El Voluntariado en 2023

Nueva sede del Voluntariado Vicentino de la Caridad en el barrio Granada.

Con muchas dificultades, el Voluntariado Vicentino de la Caridad en Armenia se mantiene con sus obras sociales, dentro de la modernización que exigen los nuevos tiempos. El Voluntariado está liderado por Lesbia Alzate de Gómez que, con el esfuerzo de todos los miembros de la entidad, lograron levantar una nueva sede, en el mismo terreno donado por don José Jaramillo Vallejo, donde se realizan las actividades.

El costurero continúa vigente. Se recogen ropas en buen estado y se venden a precios mínimos, desde $2.000 pesos, lo que tiene un doble propósito: proveer de ropa y zapatos a hogares pobres y destinar el producto de la venta a otras obras sociales.

Mercados. El programa de mercados para familias pobres se sigue realizando, como desde el inicio de la Asociación de las Damas de la Caridad. En la actualidad se entregan 70 mercados mensuales, con la colaboración de nuestro asesor el párroco de la Sagrada Familia Javier Guzmán.

Capacitación. El voluntariado desarrolla, a través de sus asociadas, en la mayoría de las veces, y también con colaboración de otros profesores, cursos de gastronomía, costura, bordados y otros para capacitar a mujeres y hombres para su vida laboral.

Ayuda a los enfermos. Una de las actividades que cumple la institución es ayudar con medicinas a personas de escasos recursos, para que sus enfermedades puedan ser sanadas o curadas.

El Voluntariado Vicentino de la Caridad financia sus obras a través de donaciones que personas de infinita caridad siguen haciendo a la institución, pero también con la venta de algunos alimentos especiales, bingos y rifas. Ayuda igualmente a la financiación el arrendamiento de dos inmuebles que están en la misma área de la sede de la institución.

Los nuevos voluntarios

En la parroquia de la Sagrada Familia y con la presencia del obispo de la Diócesis de Armenia, fueron consagradas como nuevos miembros del Voluntariado Vicentino de la Caridad de Armenia, las siguientes personas: Magnolia Sánchez de Fernández, Marina Prada Cortés, Luz Teresa Quiceno Tabares, Luz Maryori Arango Fernández y Roberto González Echeverry.

En 100 años, 34 presidentas

Estas han sido las 34 presidentas que en 100 ha tenido el Voluntariado Vicentino de la Caridad en Armenia:

Esther Arango de Vieira, Pastorita Botero de Botero, Anita Uribe de Vélez, Virginia Uribe de Botero, Graciela Jaramillo de Arango, Camila Arango Arango, Sofía Gómez de Betancurt, Clarita Ramírez de López, Anita Gutiérrez de Echeverry, Lucía Aguirre de González, Olga Salame de Hadad, Alicia Cubillos de Cano, Carmenza Nieto de Giraldo, Isabel Mejía de Botero, Lucrecia Botero de Vargas, Lucy Giraldo de Ramírez, Nohemí Estrada de Ochoa, Teresa Álvarez de Ramírez, Marina Gutiérrez de Tobón, Maruja González de Valencia, Clotilde Londoño Ramírez, Ana Luisa Tobón de Jaramillo, Jesucita Vallejo de Botero, Marina Arias de Jaramillo, Enriqueta Isaza de Montoya, Amanda Giraldo de Zuluaga, Emma Giraldo de Valencia, Pubenza Montoya de Alzate, Gladis Pérez de García, Ana Julia Alzate de Castaño, Rubiela Jaramillo de Márquez, Isabel Salazar, Noela Arias López y Lesbia Alzate de Gómez.

Junta directiva del Voluntariado

Vicentino de la Caridad 2023

Presidente: Lesbia Alzate de Gómez; vicepresidente: Magnolia Sánchez de Fernández; Tesorera: Noela Arias López; Fiscal: Roberto González Echeverry; secretaria: Maryori Arango Fernández; Coordinadora de eventos: Rosa Amanda Zuluaga de Rodas; Vocal: Roselia Reyes Alonso.

La celebración

Con una sencilla celebración, el Voluntariado Vicentino de la Caridad de Armenia recordará este viernes 21 de abril, sus primeros 100 años de actividades. Se iniciará a las 10.00 con una misa en el templo de la catedral Inmaculada. A las 11:00 se pasará al salón principal del hotel Armenia Plaza, donde se hará un acto social que incluye un recuento de la historia de la entidad, con exposición fotográfica. Después habrá un almuerzo y en las horas de la tarde una actividad académica a la que asisten voluntarias de Caldas, Risaralda, Antioquia, Quindío y Valle del Cauca.

PUBLICIDAD

Comenta esta noticia

©2024 elquindiano.com todos los derechos reservados
Diseño y Desarrollo: logo Rhiss.net